La situación convulsa y amenazadora que vive el equipo, a estas horas al borde del descenso a Segunda B en la que podría ser una tragedia para el club de certificarse esa caída al abismo, le ha impulsado del filial a la gestión de la primera plantilla después de que por delante suyo rodaran las cabezas de Luis Milla y Raúl Agné, dos veterenos de los banquillos. A punto de cumplir los 40 años (Zaragoza, 10-4-1977) César Láinez se estrenará en Elche, responsabilizado y preocupado por la empresa que tiene por delante, para convertirse en el técnico aragonés más joven en debutar en Segunda División en la historia del club. Sustituye en la misma temporada a otros dos profesionales nacidos en esta tierra, algo también inédito y será.
Láinez será, además, el cuarto preparador aragonés más joven en tomar las riendas del Real Zaragoza en el fútbol profesional. El primero fue Víctor Fernández en el curso 1990-1991, quien con 30 años se hizo cargo del equipo en lugar del uruguayo Ildo Maneiro durante las últimas 14 jornadas en Primera. Tuvo que afrontar una promoción agonizante y emotiva a doble partido contra el Murcia para esquivar el descenso. José Luis García Traid, con 34 años, se puso al frente del equipo en el ejercicio 70-71 después de que antes hubieran fracasado José María Martín Rodríguez y Domingo Balmanya Perera. En los doce partidos que le ofrecieron no pudo evitar que el Real Zaragoza se desprendiera de la élite.
Un clásico como Manolo Villanova, en la primera de sus etapas al frente del conjunto aragonés, relevó con tan sólo 36 años a Boskov en la última jornada de la campaña 1978-1979. Siguió al frente dos cursos más, pero el último incompleto el 1980-1981: Luis Costa de forma interina y Leo Beenhakker llegaron después del zaragozano.
