Anduva registrará esta tarde el mayor desplazamiento de zaragocistas del curso. La hora del partido (16.00), su trascendencia a efectos clasificatorios, con la pelea por la permanencia como telón de fondo, la cercanía con la localidad burgalesa y la mejoría del equipo con César Láinez han propiciado que más de 1.000 zaragocistas estarán en Miranda de Ebro. Se trata de un campo con las gradas muy cercanas al césped, con aspecto de ser de una categoría inferior a la de plata y que tiene un aforo para 5.600 aficionados. Está rozando los 3.000 espectadores de media en la temporada y hoy puede registrar su mejor entrada si supera los 4.200 que hubo ante el Oviedo.

Las peñas vendieron hace dos semanas el medio millar de entradas que tenían y completaron en solo tres días los ocho autobuses para este desplazamiento. Cinco de ellos salen hoy a las nueve horas de la calle Asín y Palacios. Los otros tres los ocupan las peñas Moncayo de Tarazona, Parque Goya, La Jota y La Almozara. El club, que puso las localidades a la venta el lunes, los dos primeros días para los abonados y después para el resto, despachó 520 entradas de las 650 que tenía. Ha completado la entidad dos autobuses, que saldrán a las ocho de la mañana, y el resto de seguidores hará el viaje por su cuenta.

LOS PRECEDENTES / De este modo, más de 1.000 zaragocistas se ubicarán en el fondo visitante de Anduva, en el mayor viaje del curso. De momento, los tres desplazamientos más numerosos de zaragocistas han sido a los campos del Getafe, al Coliseum Alfonso Pérez, al Alcoraz de Huesca y a los Pajaritos ante el Numancia, con alrededor de medio millar de seguidores en cada uno de sus viajes. En Soria esta temporada las malas relaciones entre los clubs frenaron un viaje masivo. Así, la salida a Miranda de Ebro supondrá un claro paso adelante de la afición para dar el aliento a un Zaragoza que durante la mayor parte de esta Liga ha sido un visitante poco fiable, si bien ahora con Láinez lleva una victoria (Elche) y un empate (Almería) en sus últimos partidos fuera.

El curso pasado, el Zaragoza estuvo acompañado en Miranda de Ebro por casi medio millar de aficionados, si bien las circunstancias eran muy distintas, ya que fue el primer partido de la 15-16 y las fechas tampoco eran las mejores, a finales de agosto.