La décima edición del Torneo San Jorge-Fundación Real Zaragoza transcurrió ayer en la Ciudad Deportiva entre la competición y el recuerdo. Los 1.600 niños, distribuidos en 112 equipos, que desde las 9.00 horas disputaron los 140 partidos que se jugaron en las instalaciones zaragocistas vivieron un día intenso donde también se recordó a Javier Ruiz de Lazcano, coordinador de la cantera durante casi 20 años y que falleció en octubre. Chirri amaba el fútbol y a la cantera zaragocista y, que en la Ciudad Deportiva se vea desde ayer bien visible ese reconocimiento a través de una placa junto a las oficinas, es un detalle magnífico, pero sobre todo justo por alguien que dio mucho a la institución blanquilla.

Chirri sentó las bases en las que se sustenta el fútbol base del Real Zaragoza, aunando los valores de honestidad, esfuerzo, compañerismo, respeto y espíritu de superación. Fue Christian Lapetra, presidente zaragocista, el encargado de descubrir esa placa junto a las oficinas en un acto donde estaba la viuda de Chirri, María Victoria Pérez. También asistió el vicepresidente del club aragonés, Fernando Sainz de Varanda. Después, ya sobre el terreno de juego de las finales, también se le hizo entrega de un ramo de flores y una placa grabada a los familiares de Ruiz Lazcano, antes de guardar un minuto de silencio en su memoria como broche final del homenaje.

En la competición, el Stadium Casablanca y el Montecarlo, en categoría benjamín de primer y segundo año, respectivamente, y los dos equipos alevines del Real Zaragoza se proclamaron campeones de la décima edición del torneo. Daniel Bellmunt, de Stadium Casablanca, fue designado como el mejor jugador del torneo en su categoría de benjamín de primer año (nacidos en el 2009). En benjamín de segundo (nacidos en el 2008), el más destacado fue Hugo Pablos, del Amistad. Jairo Blancas (Stadium Casablanca), en la categoría del 2007, y Juan Aguilar (Amistad), en la del 2006, fueron los mejores alevines del torneo.