El Numancia llega a la capital de Aragón en lo alto de la tabla con un once que apenas ha presentado grandes variaciones durante estas primeras siete jornadas de Liga. Para su visita a La Romareda, el técnico rojillo Jagoba Arrasate dará continuidad al mismo bloque del tramo inicial. El único cambio seguro con respecto al anterior encuentro que disputaron en Los Pajaritos ante el Albacete será el de Íñigo Pérez. El centrocampista no estará disponible tras sufrir una rotura en el sóleo. Su puesto lo ocupará el joven Pablo Larrea, que llegó este verano a las inmediaciones del Duero procedente del Villarreal B. La ausencia de Íñigo Pérez supone una baja sensible para el preparador guipuzcoano, ya que se ha consolidado como un baluarte en el eje del sistema. Íñigo es uno de los jugadores que más balones recupera de la categoría, una pieza de calidad contrastada en su labor de distribución.

Aitor Fernández, si no sufre ningún inconveniente en los instantes previos al encuentro, estará disponible para enfrentarse al Zaragoza. El cuerpo técnico soriano aseguró que su intención era que el portero menos goleado de la categoría pudiera estar presente en la cita de hoy, aunque fuera necesario forzar algo su condición física. La alternativa al primer cancerbero numantino era Gaizka Campos, el joven meta del filial que llegó este verano procedente del Barakaldo. El segundo portero Munir no podía estar disponible para la cita en el feudo zaragozano debido a su compromiso internacional junto a la selección de Marruecos.