No se puede encontrar a alguien en el Real Zaragoza que se atreva a hacer cuentas públicamente de los puntos que va a necesitar el equipo aragonés para mantener la sexta plaza. El fin de semana le dejó buenas noticias, sin duda, con la necesaria victoria ante el Albacete y los pinchazos de sus directos rivales. Dejó, además, la sensación de que el equipo emite algunos síntomas de mejora en el césped, sobre todo que es capaz de sacar los partidos adelante, aspecto fundamental a estas alturas en la que mandan los resultados por encima del juego. No parece que con ese fútbol le diese para sacar adelante las dos eliminatorias de la promoción, pero puede ser el camino, al menos un punto de partida. En la constancia en el crecimiento del equipo está la esperanza de su afición, tan ávida de buenas noticias.

De momento, en la plantilla no se mojan, bien conscientes de que es el momento de fortalecer el fútbol de un grupo golpeado por los altibajos durante muchos meses. Lo dijo ayer Pedro, uno de los intocables de Popovic y del que se espera un papel determinante en el final de la Liga. "No tenemos que mirar más allá, sería un error. Lo primero es el Girona y en eso tenemos que pensar porque, al final, todo puede estar en detalles", dijo el centrocampista, seguro de las posibilidades de su equipo en Montilivi: "Si estamos como sabemos, es complicado ganarnos. El Girona también debe estar preocupado por nosotros, ahora estamos con una sensación buena, sobre todo por esa pequeñita diferencia que hemos cogido. Si queremos estar en playoff, no se puede fallar en ningún campo. Ahora, cualquier pequeño despiste te puede salir caro".

En privado se mantienen los cálculos hechos una semana antes. Se cree que, tras la distancia obtenida (3 puntos al Ponferradina, 5 al Llagostera y 6 al resto), y conocido el ritmo de puntuación que llevan regularmente los rivales, podrían ser suficientes otros seis puntos para asegurar la sexta plaza y, por consiguiente, el playoff. Bastaría, por ejemplo, con ganar los dos partidos de casa (Mirandés y Las Palmas). Con nueve puntos --habría que ganar en Girona, Valladolid o Leganés, o sumar en los tres-- se da por hecho el objetivo que hoy parece más cercano. En todo caso, se concede una gran importancia a los dos próximos choques. Puntuar en Gerona y ganar al Mirandés dejaría el asunto casi liquidado. Casi.