No era la intención de Lalo Arantegui a su llegada, porque el director deportivo siempre evitó la palabra revolución y dejó claro que los proyectos tenían que tener una cierta continuidad en los nombres de jugadores, pero el paso de las semanas y el discreto rendimiento del equipo, va dejando claro que el nivel de cambios en la plantilla zaragocista también será significativo. Así, el vestuario va a sufrir una profunda renovación en este verano para continuar una dinámica que la llegada de la Fundación 2032 no ha logrado cambiar con respecto a la era de Agapito Iglesias, también muy agitada en los movimientos de futbolistas.

En la primera temporada de los nuevos propietarios, la 14-15, llegaron 15 fichajes en verano y uno más en enero, en la segunda fueron un total de 17, 11 de ellos en pretemporada y seis en invierno, mientras que en la temporada actual fueron hasta 13 en verano, mas el ascenso al primer equipo, con ficha del filial, del meta Ratón y otros cinco en enero para ser un total de 18.

En el Zaragoza no seguirán los jugadores que acaban contrato, ni Bagnack, ni Saja, ni Dongou, a los que no se les ha ofrecido seguir, tampoco lo hará Samaras, de casi nulo rendimiento, ni Feltscher, que acaba su cesión del Getafe, mientras que las tres renovaciones intentadas por la dirección deportiva se dan casi por perdidas. Marcelo Silva apunta a la MLS de Estados Unidos, Cabrera estuvo a un paso del Málaga pero sus pretensiones económicas hacen inviable que siga y Ángel tiene ofertas de Primera, la mejor colocada, y su probable destino, la del Leganés, pero cuenta con el interés de clubs de la Championship y con propuestas de Segunda, aunque el Zaragoza cree que si se queda en la categoría de plata lo haría en La Romareda. Distinto es el caso de Wilk tras su lesión de rodilla, la tercera en dos años. Se quiere tener un gesto con él, no dejarle tirado y ofrecerle un año más con un salario más bajo que el que tiene.

Mientras, hay jugadores con contrato en vigor a los que se les buscará una salida segura, como el meta Irureta, Álex Barrera, Fran o Casado, pero en ese sitio también podrían estar otros como Xumetra, Isaac, Valentín o Edu García, y el club no vería con malos ojos la salida de José Enrique, que ha intentado el salto a un equipo de Primera, sin tener ofertas de momento, un adiós que supondría una cantidad para el Zaragoza, ya que hay una opción de rescisión unilateral a favor del jugador por medio millón de euros. Lanzarote renovó tras jugar 25 partidos, pero no es un hecho que siga y tiene una opción para desvincularse.

FICHAJES HECHOS / Tantas salidas tendrán su correspondencia con las entradas, empezando por la del entrenador, que desde hace más de dos meses tiene en Natxo González el elegido por Arantegui para hacerse cargo del banquillo. Con el técnico del Reus llegará Ángel, lateral izquierdo, y muy probablemente, Alberto Benito, lateral derecho, en cuanto se confirme el descenso del Mallorca, con quien tiene un preacuerdo. El central Simone Grippo (Vaduz) ya ha cerrado su contrato por tres años y Arantegui tiene bastante perfilados otros fichajes defensivos, por lo que su prioridad ahora se centra en los extremos y en la delantera.