<b>—¿Esperaba haber estado ya en la convocatoria para el partido contra el UCAM Murcia?

</b>—No, no lo esperaba de ninguna manera. Solo había hecho un entrenamiento con el equipo y lo normal era que no fuera convocado todavía para ese encuentro.

<b>—¿Y ahora cree que puede entrar ya en el equipo titular el domingo contra el Lugo?

</b>—Yo intento estar siempre a disposición del míster para cuando me necesite y del equipo para ayudar en todo lo que pueda. Luego el entrenador es el que debe tomar las decisiones

<b>—¿Ya le ha comentado Raúl Agné lo que quiere de usted?

</b>—Poco a poco me va diciendo cosas y corrigiendo en los entrenamientos las posiciones en las que tengo que estar. Es un entrenador que le gusta mucho jugar y el juego posicional, que es mi forma preferida. Poco a poco voy metiéndomelo en la cabeza.

<b>—Pero siempre jugando por dentro, no en la banda.

</b>—Sí. Siempre he jugado por el medio centro o un poco más adelantado. En las dos posiciones estoy cómodo y creo que puedo ayudar al equipo.

<b>—Raúl Agné ha dicho de usted que es un jugador con un buen trato de balón. ¿Se ve capacitado para llevar la manija del equipo si le asigna esa misión?

</b>--Yo acabo de llegar y aquí hay muchos jugadores con mucha calidad. He estado en varios equipos y en muy pocos he visto más calidad que aquí. Tenemos jugadores de mucha calidad, que han jugado muchos partidos y que lo han hecho en grandes equipos. La manija la tiene que llevar el equipo no un jugador solo.

<b>—¿Por qué cree que en el Zaragoza va a tener los minutos que no ha disfrutado en el Oviedo?

</b>—No vengo en busca de minutos, vengo a intentar ayudar. No vengo a buscar minutos al Real Zaragoza, porque creo que eso sería una locura. Para eso me hubiera ido a un equipo más pequeño. El Real Zaragoza es el club más histórico de Segunda División y he venido para ayudar en lo que pueda. Yo espero que las cosas me salgan bien y que el equipo pueda estar arriba.

<b>—En el mercado de invierno se buscan jugadores que puedan ayudar de inmediato. ¿Se ve en condiciones de rendir bien desde el primer momento?</b>

—El mercado de invierno está en mitad de la Liga y no tienes pretemporada como en verano. Yo voy a intentar hacer lo que el míster me pida desde el primer minuto. Ahora la situación es diferente, porque no conoces a los compañeros, solo de haberlos visto jugar o de haber jugado contra ellos, y tienes que ir viendo las cualidades y la forma de moverse de cada uno. Eso se va cogiendo poco a poco en los entrenamientos y en los partidos.

<b>—Usted hace una buena temporada con el Barcelona B en Segunda División durante el curso 2013-2014, pero luego ya no ha rendido a ese nivel tan alto. ¿Por qué cree que le ha pasado eso?

</b>—Al año siguiente de estar en el Barcelona me fui a Alemania y empecé jugando los diez primeros partidos, que creo que han sido los que he rendido a más alto nivel, incluso más que en el Barça, pero luego tuve un arrancamiento en el aductor derecho. Lo pase muy mal en Alemania con esa lesión y tuve que venir a Madrid a hacer la rehabilitación. Lo cierto es que no acababa de recuperarme y firmé incluso lesionado con el Oviedo, donde hice un trabajo especifico. Luego empecé a jugar, pero no me encontraba todavía cómodo hasta este año. Esta temporada empecé jugando, pero, como cada entrenador tiene su forma de jugar, me fui quedando fuera del equipo, y la verdad es que ahora me encuentro muy bien.

<b>—¿Le molesta que se diga que usted se entrena mejor que después compite?

</b>—No, porque yo intento entrenar y jugar siempre al cien por cien. También es diferente, porque entrenando tocas más balón que jugando y enfrente hay un rival que aprieta más. Me gusta estar en contacto con el balón y asociarme con los compañeros entrenando y jugando.

<b>—¿Es consciente de que llega a un Real Zaragoza en una situación complicada por la mala clasificación del equipo?

</b>—Pero eso pasa en los equipos grandes. Si vas a otro más humilde no pasaría. Los equipos grandes tienen más presión y hay que saber llevarla. Creo que la presión que hay en el Real Zaragoza es normal. Es un club que no merece estar en Segunda División.

<b>—Grupos de aficionados han organizado concentraciones y pañoladas para mostrar su malestar por la mala marcha del equipo antes y durante el partido contra el Lugo. ¿Qué le parece?</b>

—La verdad es que me acabo de enterar de eso ahora. Yo intento no leer nada y lo que busco siempre es hacer mi trabajo lo mejor posible, me imagino que como todos los compañeros. De lo que tenemos ganas es de que lleguéeel partido y ganarle al Lugo. Jugamos contra un buen equipo, que juega bien al fútbol, pero nosotros no podemos pensar en otra cosa que en ganar.

<b>—¿Y cómo se ha encontrado el vestuario?

</b>—Muy bien. Desde el principio he podido observar que hay un buen ambiente. Ya conocía a tres compañeros (Leandro Cabrera, Dongou y Bagnack), y Cabrera, con el que estuve en el Hércules, me presentó al resto. Tenemos un vestuario muy unido y al final eso es lo más importante para conseguir los objetivos.

<b>—¿Y al míster?

</b>—Lo mismo, muy bien. El vestuario está con el míster muy bien, al cien por cien. No sigo lo que se dice en la prensa ni lo que se comenta en las redes sociales, pero yo veo al vestuario muy unido y al cien por cien con Agné. Esa es la única manera de salir adelante y de superar el momento delicado que atraviesa el equipo.

<b>—¿Nota más urgencias por lograr el ascenso de categoría aquí o en Oviedo?

</b>—Veo una situación diferente. A Oviedo vino un inversor que desde el primer día dijo que el equipo debía estar en Primera División y desde entonces la gente ha metido mucha presión. Aquí es diferente. Esto es el Real Zaragoza y por eso es normal que haya esa presión.

<b>—Usted pudo recalar en la plantilla del Real Zaragoza con anterioridad, pero ¿estuvo tan cerca esa posibilidad?

</b>—El año pasado tuve casi la maletas hechas para venir en invierno, pero al final el Oviedo no me dejó salir. En caso contrario hubiera venido seguro. Este año surgió otra vez la posibilidad y desde el primer momento no me lo pensé, pero lo mismo que el año pasado. Lo que sucede es que el Oviedo no quiso que saliera.

<b>—¿Hasta qué punto ha influido en su llegada Narcís Juliá?</b>

—Mucho. No sé con otro director deportivo, en caso de no estar él en el Real Zaragoza, si se hubiesen fijado en mí, pero sé la forma que tiene de ver el fútbol y los entrenadores que le gustan. En este caso, Raúl Agné quiere jugar y quiere atacar, que es lo que a mí me gusta.

<b>—¿Sería un fracaso que el Real Zaragoza no estuviera disputando la promoción de ascenso a Primera al final de la Liga regular?

</b>—Estamos en un momento delicado y hay que ir poco a poco. Ahora tenemos que pensar en el partido contra el Lugo, pero nosotros tenemos sin duda una de las mejores plantillas de Segunda División. Esto es muy largo y si te metes presión y urgencias al final te vas a comer la cabeza y no sabes dónde vas a estar. Llegando a los dos últimos meses con opciones de meterte arriba puedes llegar a cualquier sitio.

<b>—Y ahora para reaccionar necesitan ganar al Lugo tras haber sufrido tres derrotas en el 2017 y no haber marcado todavía ningún gol.

</b>—Después de tres derrotas igual llega la ansiedad de ganar y muchas veces eso no es bueno porque te metes en un círculo vicioso que no te deja ver la luz. Ahora hay que limpiarse la cabeza, porque esto es muy largo. Si los dos últimos meses tienes opciones de estar arriba es cuando de verdad tienes que demostrarlo. Yo intento mirar lo más arriba posible, porque el Zaragoza tiene plantilla para eso. Como ya he dicho antes, nosotros tenemos una de las mejores plantillas de Segunda.

<b>—Pero los dos primeros (Levante y Girona) ya están muy lejos y en estos momentos parecen inalcanzables.

</b>—Así es, pero llevo varios años jugando en Segunda División y todo puedo pasar. Estando yo en el Salamanca íbamos terceros al principio de la segunda vuelta y descendimos de categoría. Puedes estar en descenso ahora y luego si coges una buena racha te puedes meter en el playoffs. Así es esta categoría. Normalmente las diferencias entre los equipos de abajo y los de arriba son muy pequeñas.