Adam Pinter fue ayer baja de último momento por lesión frente al Levante. El jugador húngaro hizo el calentamiento e incluso su nombre llegó a aparecer en la alineación inicial facilitada por Manolo Jiménez, pero luego tuvo que quedarse en la grada. Pinter estaba destinado a acompañar a Álvaro en el eje de la defensa o a que ese puesto fuera ocupado por Javi Paredes, pero, tras causar baja el internacional magiar, el técnico prefirió dar entrada a Goni en el lateral derecho y colocar a Sapunaru como central. Además, Lanzaro, que había sido el descarte de los 19 convocados, ocupó un sitio en el banquillo.

El internacional húngaro, que arrastraba molestias en los isquiotibiales desde el jueves, será sometido a pruebas médicas en las próximas horas para comprobar el alcance de la lesión muscular que sufre. "Pinter tiene un pinchazo, un punto de dolor en el bíceps femoral. Lo hemos concentrado y lo hemos aguantado hasta última hora, pero el sábado ya sabíamos que era prácticamente imposible que pudiera jugar. Ha calentado simplemente por probar, pero evidentemente no está en condiciones. Creemos que no está roto, pero le tendrán que hacer una ecografía, porque tiene un pinchazo en el bíceps", comentó Manolo Jiménez.

A causa de las bajas, Adam Pinter había sido titular en los dos últimos partidos disputados por el Zaragoza, en la Liga contra el Rayo y en la Copa frente al Levante, pero ayer no pudo estar a disposición de Jiménez. Con Loovens lesionado, todo apuntaba a que Pinter o Paredes entrarían en el eje de la zaga, pero al final actuó de central Sapunaru.