El fichaje de Alberto García por el Real Zaragoza sigue, de momento, en manos del Getafe. Es el elegido por Lalo Arantegui, el primero en la agenda del director deportivo para ser el portero titular del equipo aragonés la próxima temporada, pero su llegada tiene aún un escollo que superar. El guardameta barcelonés tiene contrato con el club azulón para la próxima temporada y, en Primera División, su ficha sería mucho mejor de la que podría ofrecerle el Real Zaragoza o cualquier otro club de Segunda. Así que Alberto, su representante y, por extensión, el Real Zaragoza, están esperando a que el Getafe se pronuncie sobre sus intenciones respecto al portero.

El contrato que une a Alberto con su actual club no contiene ninguna cláusula especial de salida más allá de la habitual de rescisión, por lo que si el Getafe no decide romper ese vínculo, el Real Zaragoza no podría acceder al portero. En principio, el club que preside Ángel Torres querrá reforzar su portería para el próximo curso en Primera y Alberto parece tener más opciones de ser el descarte, pero esa decisión todavía no se ha hecho oficial, después de que el Getafe consumara su ascenso a Primera el pasado sábado. Que se produzca, lo que puede ser cuestión de días, será el primer paso para la salida del portero. El siguiente será el acuerdo, económico, se entiende, para que Alberto abandone el club azulón.

En ese momento, ya con la carta de libertad en la mano, podrá producirse el tercer y último paso, su firma como nuevo jugador del Real Zaragoza. Porque el club aragonés ni puede ni va a abonar la cláusula de rescisión del portero, así que Alberto solo llegará a la capital aragonesa una vez que se desvincule por completo del Getafe. En ese caso la intención del Real Zaragoza es que Alberto llegue a La Romareda para ser el portero titular del equipo que dirigirá Natxo González y ocupe ese puesto junto con Álvaro Ratón, el guardameta que más partidos ha defendido la portería aragonesa esta temporada.

UN FICHAJE CLAVE / La incorporación de un portero de garantías es una de las claves en el verano zaragocista, más aún teniendo en cuenta la inestabilidad que ha sufrido el puesto esta temporada recién terminada. El fichaje de Irureta, que llegó en verano con la vitola de titular, se desveló como un fiasco y obligó primero a la titularidad de Ratón, ascendido desde el filial, y, después, a la incorporación de Sebastián Saja. Al final los tres fueron alternándose, Irureta fue titular 17 partidos, Ratón estuvo en 19 y Saja, en los 6 restantes. El Real Zaragoza encajó 52 goles. Ahora el único que tiene asegurada la continuidad es Ratón, mientras el argentino se ha retirado e Irureta es una de las salidas que el club debe resolver.

La solución que Lalo Arantegui quiere dar a esa portería tan voluble como perforada es Alberto García. De 32 años, ha jugado 34 partidos con el Getafe, si bien Bordalás ha optado por Guaita en la recta final de la temporada, y cuenta con sobrada experiencia en la categoría. Aunque debutó con el Murcia en Primera en el 2008 y siguió en el club pimentonero el curso siguiente, fue en el Córdoba donde se hizo un hueco en la categoría, siendo titular durante tres campañas. En el 2013 se marchó al Sporting de Gijón para ser suplente de Cuéllar y, después de tres años en Asturias, firmó por el Getafe el verano pasado. Su siguiente paso será el Real Zaragoza siempre y cuando el Getafe decida prescindir de él y le rescinda el contrato en los próximos días.