El entrenador serbio Ranko Popovic será el que lleve los destinos del Real Zaragoza después de la destitución comunicada ayer por la tarde a Víctor Muñoz. Popovic era desde hace semanas el candidato elegido por los rectores deportivos de la entidad y en la práctica no se ha hablado con casi nadie más. El entrenador, que llegó anoche a la capital aragonesa desde Barcelona y hoy será presentado (12.30 horas) para dirigir esta tarde su primera sesión, firma por esta temporada y por otra más porque la apuesta es que sea un hombre de club. Es decir, un técnico que esté un tiempo prolongado en la entidad.

La delicada tesitura que vivía en el Zaragoza Víctor Muñoz ya había hecho al club, a su área deportiva, tener muy marcado el sustituto que se iba a traer en el caso de que la situación fuera irreconducible. Aunque se deseaba que Víctor acabara la temporada, las relaciones se habían deteriorado tanto que la destitución era una opción real que los malos resultados, cuatro partidos sin ganar y un punto de 12, han terminado por traer. Así, Popovic, que tiene su residencia más habitual en Viena y que llega con un segundo entrenador y un preparador físico, lleva un tiempo, por así decirlo, sabiendo que en el caso de que el técnico aragonés fuera destituido contaba con opciones de venir.

SUS REFERENCIAS

Popovic, perfecto dominador del castellano y también de otros idiomas como japonés, alemán y, lógicamente, serbio, tiene en Ivica Osim a una de sus referencias como entrenador y su apuesta está en el fútbol, en intentar que sus equipos dominen la posesión y sean verticales. Los que lo conocen aseguran que es un entrenador muy cercano a los gustos más tradicionales de La Romareda. El entrenador serbio sigue la estela de otros que ya pasaron por el Zaragoza como el fallecido Boskov o Radomir Antic.

Popovic (Pec, 26-06-1967) dirigió hasta junio al Osaka japonés, al equipo más potente de esa Liga, pero su historial como entrenador empieza mucho antes, en Austria, en el Arnfels (01-03). Antes fue futbolista, formándose en la cantera del Partizan de Belgrado, donde llegó a debutar como profesional. Su debut fue como lateral zurdo, a pesar de ser diestro, pero su posición más habitual estuvo en el centro de la defensa. Trebinje, Subotica, en la antigua Yugoslavia, y Ethnikos (Grecia) vieron transcurrir su carrera como jugador hasta que llegó al Almería, donde jugó dos temporadas (95-97) y 16 partidos. De esa experiencia sacó un conocimiento del castellano, frecuentes visitas a esta ciudad y su deseo de dirigir en España, objetivo que va a ver cumplido por fin.

AUSTRIA Y JAPÓN

Los últimos años de su carrera de jugador los consumió en el Sturm Graz (74 partidos entre 1997 y el 2001) para regresar y colgar las botas en el Arnfels, donde empezó su carrera como entrenador. Fue segundo entrenador en el Sturm Graz, tres años (02-05) donde el equipo austriaco fue habitual en la Champions League, y en el Hiroshima de Japón antes de ser reclamado para ser primer técnico por el Zlatibor Voda de Serbia, al que en cinco meses ascendió de categoría en esa liga.

La fusión de ese club con el Spartak de Subotic le permitió dirigir a ese equipo en la 08-09, mientras que desde agosto del 2009 ha entrenado en Japón (Oita Trinita, Machida Zelvia, FC Tokyo y Osaka), donde su carrera ha ido subiendo peldaños hasta tomar las riendas del equipo más potente de esa Liga, donde tuvo a sus órdenes a Forlán. Fue destituido el 9 de junio aprovechando el receso estival de la J-League nipona por los malos resultados. Ahora, con el equipo zaragocista da el salto a España y fuentes cercanas al entrenador aseguraron a este diario que lo hace con una ilusión tremenda por intentar lograr el ascenso a Primera División.