Juan Muñoz se quedó en la grada el domingo ante el Girona, una decisión que solo cabe interpretar como un paso más que empuja al delantero utrerano hacia su salida, hacia la necesidad de acabar con la cesión por parte del Sevilla que dura hasta junio. El deseo de todas las partes es que finalice a lo largo de este mes de enero.
Por encima de la impresión, o algo más que eso, de que las relaciones entre Raúl Agné y el jugador no son las mejores, sino al contrario, se impone la evidencia de los números. Y esta muestra que el entrenador no ha contado con el punta desde que lo alineó en la segunda parte ante el Cádiz, en 40 minutos de nula aportación.
Tres partidos sin jugar
No disputó ni un minuto ante el Oviedo, ni tampoco ante el Rayo, partidos donde se produjo la irrupción como titular de Xiscu, y los minutos de forma continua para Dongou, que también jugó de inicio en Vallecas. Esos dos futbolistas, como Ángel, están por delante de Juan Muñoz en las preferencias de Agné. Y conviene no olvidar que el Zaragoza busca un delantero en este enero, con Chuli como primera opción tras tantear la de Sobrino (Alavés).
El paso definitivo fue dejarlo en la grada ante el Girona el domingo, una señal más que evidente de que el jugador va a salir. Erik Morán, el otro futbolista de peso de la actual plantilla señalado en este enero (el protagonismo y la ficha de Popa son mucho más bajos), sí estaba convocado ante el cuadro catalán. Muñoz, ni eso. Tampoco Álex Barrera, si bien al jugador asturiano no se le ha transmitido nada sobre una salida y su deseo es revertir su situación y ganarse más protagonismo en el equipo.
La distancia que separa a esos casos es que la decisión de Juan Muñoz de irse es tan firme como la del Zaragoza de abrirle la puerta. El propio agente del delantero se lo dijo al Sevilla antes del parón navideño. La postura del club de Nervión es la de facilitar romper ese préstamo siempre que no suponga un daño económico importante para la entidad. El Córdoba y el Almería, que ya tuvieron en la agenda al delantero en verano, son aspirantes, si bien la entidad almeriense parece inclinarse por otro tipo de punta, con más capacidad aérea. Eso sí, el Córdoba y el Sevilla tienen buenas relaciones, lo que puede facilitar esa llegada, y en un último caso no se descarta un regreso de Juan Muñoz para reforzar al filial sevillista en Segunda, si bien es la opción más remota.
Lo que sí parece claro es que la situación actual ya es insostenible y que la necesidad de que Juan Muñoz (que aseguraba ayer estar centrado solo en el Zaragoza) deje el equipo aragonés en este mes de enero es cada vez y a cada partido que pasa más evidente.
