En la última media hora, la que precede al carrusel de los cambios en masa y a la falta de oxígeno, el Real Zaragoza, escudado en sus centrales y en un Ratón pletórico, se despojó de sus terribles complejos de la primera mitad, estratégicos por probar sin delantero e individudales en el caso de un Verdasca que va justo para defender y sin capacidad alguna para hacerse cargo de la direccción del equipo. Le salvó un detalle elegante de Buff para asistir a Pep Biel en el gol del empate, el cambio de Torras por Verdasca para no provocar más ataques de histeria entre sus compañeros y la irrupción de Soro, un chico que quizás los minutos los deba consumir en la primera plantilla, un futbolista que habita dentro de la lámpara del genio y que sale para conceder deseos. Un empate contra este Villarreal de seda es todo un tesoro, un botín que se ganó el conjunto aragonés con sufrimiento aunque también con gestos de grupo competitivo pese a estar a medio hacer en el horno táctico y en el vestuario. Marc Gual viene ya para reforzar el ataque, una zona donde de nuevo se suspendió. Idiakez probó con el tándem Buff-Pombo, lo que significa por lo general el desfalleciminto de ambos. El helvético, por lo menos, fabricó un pase magnífico en el tanto de la igualada.

El resultado premia un partido aceptable del Real Zaragoza tras reponerse de un error de Verdasca que cuestiona no ya la enésima y desafortunada probatina del luso por las ausencias de especialistas en esa posición como Eguaras, Zapater y Guti, sino incluso su titularidad. De constructor es un desastre; de central corre el peligro de verse desplazado por el rendimiento que ofrece Álex Muñoz, mucho más aseado en la salida de la pelota y sobre todo en la toma de decisiones. En Villarreal formó una pareja de espléndida sintonía con Grippo, quien protagonizó una tarde magnífica. Imanol Idiakez tendrá que decidir pronto en este espinoso asunto. En la confección de la plantilla deberán echarle varias manos. Arriba y en el centro del campo con urgencia pese a que el club carezca de recursos y su intención sea exprimir al máximo el calendario del mercado de verano.

La cantera volvió a estar en su sitio, lo que ya no es novedad. Además en un amistoso de relevancia. La mayoría cumplió e incluso dejó destellos en cuanto se soltaron las amarras del encuentro. Torras llegó para serenar el medio campo y para imprimirle agresividad, Biel marcó y se deslomó desplazado de su zona natural y Soro... Se puso a desbordar a los señores del Villarreal como si fueran novatos y Asenjo tuvo que explotar todas sus virtudes para despejar un violento zurdazo del mediapunta. Por aquí y por allí. Te la muestro y me voy. Es pronto, muy pronto, para encumbrarle, pero que no caiga la noche de la mojigatería sobre él bajo la excusa de que debe madurar en la isla de Elba.