Se ha ganado Toché en dos años el cariño de la afición oviedista. Llegó en el verano del 2015 tras rescindir su contrato con el Deportivo. Entonces, Ángel Martín González, director deportivo zaragocista y ahora en el Oviedo, meditó su fichaje, pero se decantó pronto por Ángel y por Ortuño, que se fue meses después para triunfar ahora en el Cádiz. No tuvo mal ojo para los delanteros en el Zaragoza Martín González (también llegaron con él Willian José o Borja), pero es indudable que Toché hubiera sido una buena apuesta, los 33 goles ligueros que lleva en dos cursos, 17 en el pasado y 16 en el actual, lo acreditan.

Formado en la cantera del Atlético, en José Verdú Nicolás Toché (Santomera, Murcia, 1-1-83), habita un buen delantero para Segunda. Las veces que ha intentado el salto a la élite, en el Numancia o en el Deportivo, ha dado más sombras que luces, pero en la categoría de plata sus números le avalan, con 87 goles a sus espaldas entre Hércules, Valladolid, Numancia, Albacete, Cartagena, Deportivo y Oviedo. Además, estuvo dos temporadas en el Panathinaikos griego, al que llegó en el verano del 2011 para salir en enero del 2014. Allí anotó 25 goles en 61 partidos oficiales y llegó a jugar la previa de la Champions, pero se marchó tras medio año inédito.

Toché fue la referencia el curso pasado para Sergio Egea primero y para David Generelo después, con 37 partidos jugados, 31 de titular y 17 goles en Liga, además de otro en Copa. De hecho, fue el autor del tanto que doblegó al Zaragoza en el Tartiere. Este curso, para Hierro también es fijo, con 16 goles, 36 partidos y 34 de ellos en el once.

Toche es un delantero de referencia, un 9 con buenos movimientos y, sobre todo, muy inteligente en el área. Desde su llegada al Tartiere se ha sentido muy integrado en un club que, desde la entrada del Grupo Carso de Carlos Slim, es para muchos de los que pasan por él un ejemplo de proyecto y de profesionalidad. Además, Toché, sin ser uno de los capitanes, sí es un jugador con influencia en el grupo.

El punta murciano ya ha vivido ascensos con el Valladolid, en la 06-07, el Numancia, un año después, y el Deportivo, en la 13-14, en la primera temporada del Zaragoza en la categoría de plata en el largo peregrinar actual. Entonces, llegó en enero y anotó cuatro goles claves para que el cuadro gallego acabara en la élite.

Ahora, en Oviedo busca por la vía de la promoción su cuarto ascenso, teniendo en cuenta que, salvo revolución veraniega, ese salto le permitiría volver a la élite, ya que tiene contrato hasta 2018 y una posible temporada más en función de objetivos. Toché, además, nunca ha ocultado que a sus 34 años se siente a gusto, tanto él como su familia, en la ciudad asturiana. Tanto, que ha rechazado jugosas ofertas del extranjero recientemente.