Lo dice con rotundidad Cedrún, sin dudar ni un ápice: «Cristian Álvarez es un portero de nivel de Primera, con personalidad y con categoría de élite, la Segunda se le queda pequeña». Andoni, y otros exporteros del Zaragoza, como Vitaller, Sánchez Broto o Manolo Villanova, o el extécnico Raúl Longhi (segundo de Víctor Muñoz y que coincidió con el meta argentino en el Espanyol), destacan sobre todo la tranquilidad que ofrece el arquero zaragocista, además de ver en él por fin a un meta para mucho tiempo después de unas temporadas con muchos cambios en esa demarcación.

«El Zaragoza está teniendo una evolución positiva en los últimos partidos, con momentos de buen juego, pero concede demasiadas ocasiones. Lleva los encuentros a un intercambio de golpes y es ahí donde aparece Cristian, el valor de tenerlo. Su aportación ahora es vital, pero si el Zaragoza quiere seguir mirando hacia arriba necesita que los partidos no tengan tanto intercambio de ocasiones, porque el portero no va a estar a este nivel siempre, habrá días que no haga paradas milagrosas», reflexiona Andoni Cedrún, que cita casi de carrerilla las virtudes del portero argentino: «La tranquilidad, la personalidad y el no entrar en los nervios del equipo cuando no salen las cosas. Tiene un gran uno contra uno y es ágil bajo palos, aguanta muy bien, es potente y con buen golpeo. Además, posee muy buenos reflejos y una reacción rápida, como se vio en el despeje con el puño tras el tiro de Uche en Tarragona».

En ese elogio, Andoni no se olvida de los penaltis que ha detenido Cristian, vitales para ganar en su día al Córdoba o al Sporting: «Sabe aguantar hasta el final al tirador. Eso es lo que le permite ser bueno en esa faceta», destaca el exportero zaragocista, uno de los históricos del equipo, con 361 partidos bajo palos, el octavo que más ha jugado con esta elástica. También es uno de los grandes clásicos Manolo Villanova, que no solo se puso bajo palos sino que además trabajó muchos años en la Ciudad Deportiva y fue entrenador del primer equipo en tres etapas distintas: «Cristian está atravesando un momento se diría que mágico, donde la saca con el pie, con la rodilla o con lo que haga falta. Pero más allá de ese momento, yo destaco su progresión, cómo ha ido adaptándose al Zaragoza y a lo que implica esa portería en Segunda».

A un partido de renovar

Para Villanova, lo mejor del portero argentino es «su capacidad bajo palos, donde creo que es casi imbatible, es muy ágil y con muchos reflejos, como ha demostrado en los penaltis y en paradas casi a bocajarro. Es verdad que no sale mucho de su portería, pero cuando lo hace da seguridad. Es raro verle fallar en una salida».

Mientras, Vitaller, que estuvo ocho temporadas en la primera plantilla zaragocista, y que actualmente es preparador de porteros en el Amistad, en el San Juan y en el Brea, cree que con Cristian Álvarez el Zaragoza «ha ganado portero para un tiempo, porque en su proceso de adaptación también ha demostrado saber llevar bien lo que implica ser el meta de este equipo», asegura. De hecho, Cristian Álvarez, que llegó el pasado verano, está a un partido de llegar a los 25 encuentros oficiales y de renovar su contrato de forma automática hasta junio del 2020, lo que sucederá el domingo contra el Oviedo.

«Empezó la Liga de forma más irregular, porque le costó adaptarse, pero ya lo está perfectamente y es fundamental en este Zaragoza su experiencia. Ha sido protagonista por paradas y por penaltis, pero yo destaco sobre todo la seguridad que da, que el equipo sabe que está ahí cuando se le necesita, como se vio en Tarragona y ante el Lugo. Es muy tranquilo, valiente y sale sin miedo. Es verdad que no bloquea mucho, pero ofrece seguridad en sus acciones», sentencia Vitaller.

Por su parte, Sánchez Broto, exportero y ahora empresario de tiendas deportivas, destaca sobre todo que «da aplomo y tranquilidad al equipo en su faceta defensiva. Es bastante inteligente, entiende bien el fútbol moderno, en el sentido de que visualiza bien las jugadas y sabe anticiparse a lo que va a ocurrir, cualidades que ahora mismo son fundamentales», explica el exarquero, formado en la cantera zaragocista y que estuvo en el primer equipo dos temporadas (92-94). Además, como Villanova, también pone el énfasis en el buen papel complementario de Álvaro Ratón para Cristian y no duda sobre el carácter del argentino. «La Romareda es especial y un lugar complicado. Como dijo Andoni en su día, es un sitio que solo tiene comparación en la portería con otros dos o tres equipos de España y Cristian está sabiendo llevar eso y la propia situación del equipo en Segunda».

Raúl Longhi era el entrenador del Espanyol B cuando Pochettino tenía a sus órdenes a Cristian Álvarez en el primer equipo catalán y hasta dirigió un partido de Copa en la 12-13 ante el Sevilla en la transición entre Pochettino y Javier Aguirre. «Yo estaba en el filial, pero lo conocí bien, cómo trabajaba y el carisma que tenía en la plantilla. Es un portero que transmite seguridad, que posee tranquilidad, que domina el área y que tiene mucha personalidad. En el Zaragoza está dando un gran nivel porque ha tenido esa continuidad y ha ido subiendo su rendimiento. No me sorprende, le he visto trabajar de cerca y sé cómo se esfuerza y lo profesional que es», dice Longhi.