Decenas de zaragocistas han acudido a La Romareda para honrar al grito de "grande" a una perla de la cantera, Rubén Gracia "Cani", que cuelga oficialmente las botas un año después de volver a su casa, al Real Zaragoza.

En la despedida oficial, el ya excentrocampista ha estado acompañado en la rueda de prensa por sus padres, su mujer, sus hijos, amigos, parte de la directiva del club que le vio crecer y compañeros como Alberto Zapater, al que ha ensalzado por llevar los colores del Real Zaragoza "grabados en el corazón" en el momento más emocionante del acto y en el que ambos jugadores no han podido retener las lágrimas.

Cani ha decidido poner fin a una trayectoria de casi 25 años practicando "ese deporte maravilloso" que es el fútbol y 15 años después de debutar en el club de sus amores.

"Siempre he querido ser honrado", ha subrayado, y ahora ya no está al cien por cien tanto en el aspecto físico como en el mental, por lo que ha optado por retirarse en lo que ha sido una decisión "profundamente meditada".

Ha mostrado su agradecimiento a las cuatro personas más importantes de su trayectoria deportiva: su padre, que le enseñó los valores de la profesión; su madre, que le dio "el cariño que solo una madre da"; su hermano, que no dejó que se le fueran los pies del suelo; y su mujer, que sin saber sobre el mundo del fútbol ha sabido estar en los buenos y los malos momentos.

El fútbol, ha continuado, ha dado sentido a buena parte de su vida, y ha rememorado sus comienzos en el Stadium Venecia de la capital aragonesa, en el Utebo, en el Atlético de Madrid, en el Deportivo de la Coruña y, sobre todo, en el Villarreal, club del que guarda un "recuerdo imborrable".

Pero su pasión, donde siempre tendrá su corazón, es La Romareda, donde supieron esculpirle y formarle como deportista y como persona, ha relatado.

Al equipo blanquillo le debe su debut y su último año de fútbol y a la afición, su gratitud, ya que "nunca" ha recibido un reproche ni la ha sentido lejana.

Posteriormente, en el césped de La Romareda, ha dirigido unas palabras a los zaragocistas allí congregados y ha agradecido su presencia regalando fotos y autógrafos a unos aficionados que difícilmente lo olvidarán.