Un funcionario del centro psiquiátrico Doctor Esquerdo, en Alicante, lleva 15 años enlazando bajas con vacaciones y cobrando de la Diputación. Según él, «al final se juntan muchas pequeñas cosas» que le impiden trabajar. Su modus operandi siempre se repite, tal y como explica el diario Información: una vez consigue un parte de baja firmado por un médico, agota el periodo legal de un año y medio hasta que la Seguridad Social le comunica que debe reincorporarse, ya que no tiene una incapacidad. No obstante, acto seguido solicita las vacaciones que le corresponden por el tiempo que ha pasado de baja y, cuando las agota, presenta otra baja. Desde el 2011, sin embargo, un cambio normativo le obliga a trabajar entre baja y baja seis meses, pero, según sus compañeros, tras su última baja se ha declarado incapaz, por lo que le permiten que solo vaya media hora los jueves. Ni la Diputación de Alicante ni la Seguridad Social han podido hacer frente a esta práctica, ya que el procedimiento es técnicamente legal. Hasta los sindicatos han abordado el problema. «Es un bajista de profesión, un absentista patológico que se ha ido buscando la vida para estar siempre de baja», según uno de sus representantes. El diputado de Personal, Alejandro Morant, culpa a la Seguridad Social por no haberle dado una incapacidad o haberle forzado a volver a trabajar.