Una de cada cinco alumnas españolas de 15 años reconoce que va a clase sin haber desayunado antes en casa, según recoge la encuesta de la OCDE, que no entra a analizar, sin embargo, los motivos de este ayuno, ni si es voluntario o involuntario. Entre los chicos, el porcentaje es del 11%.

Los estudiantes valencianos son, con un promedio del 18,1% entre chicos y chicas, los que más veces van al instituto sin haber ingerido ningún alimento. No obstante, esos datos son inferiores a la media de los países participantes en el informe PISA, que de media se saltan el desayuno en el 26% de las chicas, y en el 18% de los chicos.

En general, los muchachos que han tomado algún alimento antes de empezar la actividad escolar consiguieron 10 puntos más (seis en las mujeres) en las pruebas de Ciencias de la última evaluación internacional PISA 2015 en comparación con los que estaban en ayunas.

En España, «los alumnos practican alguna actividad física dos días o menos a la semana, mientras que en los países que practican deporte con más frecuencia sacan mejores notas», señala la encuesta. El 9% de los alumnos españoles no practica ningún deporte en el tiempo libre.