El deslizamiento de tierra que arrasó el pasado jueves un asentamiento aledaño a la capital de Guatemala ha dejado por el momento 44 muertos y 350 desaparecidos, según informaron ayer diversas fuentes oficiales. La portavoz del Ministerio Público (MP-Fiscalía), Julia Barrera, indicó que la cifra de víctimas mortales asciende a 44, pero agregó que de ellas solo han sido identificadas 20 y que de algunas de las otras 24 solo hay algunos restos.

Inicialmente las autoridades estimaron en 600 los desaparecidos. Según el secretario ejecutivo de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, Alejandro Maldonado, se trata de una tragedia anunciada. "Desde el 2008 esa zona fue declarada de alto riesgo", dijo.