El derribo del hotel del Algarrobico en Carboneras (Almería) parece cada día más cerca. La Junta de Andalucía ha solicitado formalmente al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) una "autorización de entrada" en los terrenos para tomar posesión de la finca como propietario y proceder, por tanto, a la demolición del inmueble según la voluntad expresada en los últimos tiempos por la Administración, confirmaron fuentes de la Consejería de Medio Ambiente. La petición pretende pedir "auxilio judicial" al alto tribunal andaluz para hacer efectivo el derecho de retracto que el Ejecutivo andaluz ejerció sobre varias de las parcelas de la zona. La Junta de Andalucía consignó en agosto del año pasado el dinero de dicho retracto en aras de sus intereses medioambientales, unos 2,3 millones de euros, pero la promotora del inmueble, Azata del Sol, "ha impedido la entrega voluntaria" de la finca adquirida.

El derecho de retracto, que permitió poner la finca a nombre de la Junta en el registro de la propiedad, fue validado por los tribunales, por lo que ahora la Administración pide a Azata que designe una cuenta bancaria donde depositar ese dinero.

UNA CUENTA BANCARIA Por lo tanto, la Junta requiere que sea el TSJA el que inste a Azata del Sol a precisar en qué cuenta puede abonar dicha cuantía o, en su defecto, señale al Gobierno autonómico en qué cuenta debe llevar a cabo la "correspondiente consignación judicial, con plenos efectos liberatorios".

El gobierno regional ha citado a las mercantiles en distintas ocasiones para concretar el pago y ocupación de los terrenos. Todos han resultado infructuosos.

Según el escrito, la intención de la Junta de Andalucía es tomar posesión de la finca, donde se levanta el hotel de 20 plantas y más de 400 habitaciones, para iniciar el protocolo suscrito en el 2011 con el Gobierno central y proceder a la demolición del inmueble, devolviendo así la playa a su estado original.