El avión de la compañía española Swiftair que realizaba el trayecto entre Burkina Faso y Argelia se ha estrellado este jueves, según han confirmado las autoridades argelinas.

El Aeropuerto Internacional de Uagadugú (Burkina Faso) ha confirmado que el avión se ha estrellado en Kidal, en el norte de Malí, "donde las tropas francesas han iniciado los vuelos de reconocimiento apoyadas por la aviación destacada en esa ciudad, ocupada hace meses por los rebeldes".

El aparato, en el que viajaban 116 pasajeros y 6 tripulantes, ha perdido el contacto con la aviación civil argelina 50 minutos después de despegar. Los 6 tripulantes son de nacionalidad española: hay dos mallorquines, tres madrileños y un vasco.

Por su parte, el pasaje estaba compuesto por 51 franceses, 28 burkineses, 20 libaneses, 5 canadienses, 4 alemanes, entre otras nacionalidades, ha informado la compañía argelina. También viajaban a bordo un ciudadano suizo, un belga, un camerunés, un ucraniano, un egipcio, un nigeriano, un maliense y un luxemburgués.

La compañía apunta al mal tiempo

La causa más probable de la desaparición del avión ha sido el mal tiempo reinante en la región del norte de Mali, han dicho fuentes de la compañía Air Algérie.

Según esta tesis, "lo más probable es que se trate de un accidente" debido a las fuertes tormentas que azotaban la pasada noche esa región del Sahel. Las fuentes no han podido confirmar si el avión fue desviado de su ruta normal desde alguna torre de control, como han afirmado algunas versiones.

Esta teoría parece descartar la posibilidad de un ataque deliberado al avión, una hipótesis que se ha contemplado dada la inestabilidad que vive la zona donde ha aparecido el rastro del aparato, la región septentrional del norte de Mali donde quedan todavía activos grupos yihadistas.