Los Mossos d’Esquadra están desplegando desde el mediodía de este martes un dispositivo extraordinario en Barcelona y sus alrededores. El operativo policial incluye controles en la autopista C-33, que han provocado retenciones de más de 4 horas, y en la AP-7, con colas de hasta 15 km. El refuerzo con agentes armados con subfusiles en puntos de especial interés turístico se ha hecho evidente para los ciudadanos.

La presencia de agentes con armas largas se concentra en lugares como la estación de Sants, la Rambla, el casco antiguo, el Aeropuerto de El Prat y el Camp Nou.

El nivel de amenaza terrorista se mantiene en 4 sobre 5. La tensión de las operaciones de prevención se ha tensionado tras los atentados del 17 de agosto en la Rambla y Cambrils. Sin embargo, el dispositivo de contención es especial por dos motivos.

El primero es que este martes ha llegado a través del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) una alerta internacional que identifica a 5 individuos que pretenden atentar de forma inminente en Europa.

En este aviso no existe ninguna alusión concreta a la ciudad de Barcelona. Pero el segundo motivo que ha obligado a convertir este dispositivo en algo extraordinario está relacionado con la última edición de la revista 'Rumiyah', un publicación electrónica de propaganda del autodenominado Estado Islámico. Este último número dedica su bloque principal a los atentados de Barcelona.