Científicos del Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona han conseguido clasificar y predecir si los diversos tipos de tumores de colon se reproducirán en otras partes del cuerpo una vez extirpados analizando sólo las células del entorno del tumor. En una investigación que publica hoy la revista Nature Genetics, el equipo anuncia que están desarrollando un test que permite identificar a los pacientes con riesgo de recaer en la enfermedad una vez extirpado el cáncer, midiendo entre cuatro y seis genes del entorno tumoral.

También proponen ensayar con pacientes un determinado fármaco que, en ratones, frena la capacidad de los tumores de colon de hacer metástasis y que ha sido probado con éxito en laboratorio con una nueva tecnología que permite cultivar minicánceres de colon, también denominados organoides, derivados de pacientes.

El equipo, liderado por el investigador Eduard Batlle, analiza los genes de células del entorno del tumor, lo que se denomina estroma. "Hemos reevaluado las clasificaciones bajo nuestro prisma y confirmamos que el cáncer de colon reaparece en forma de metástasis en aquellos pacientes en que las células tumorales son capaces de pervertir el entorno del tumor", explicó Batlle. El equipo ha examinado el perfil genético de un millar de tumores. "La clave de las clasificaciones yace en si el estroma del tumor está alterado o no y es esta propiedad la que confiere a los tumores de colon malignidad. Los pacientes con el estroma inalterado quedan libres de la enfermedad, esencialmente, tras extirpar el tumor", sentencia Batlle. El científico asegura estar muy cerca de conseguir un test de diagnóstico, denominado Colostage, para identificar a los pacientes con más probabilidades de hacer metástasis.