Una jueza de Barcelona ha abierto una investigación contra tres abogados y un procurador por un delito de descubrimiento y revelación de secretos por haber aportado en un proceso de divorcio documentos personales, desde escrituras a extractos de tarjetas de crédito, que guardaba la parte contraria en su despacho. El Juzgado de Instrucción número 19 ha citado a declarar a los cuatro querellados para septiembre.

Los dos miembros de la pareja divorciada son abogados. En el 2014, la mujer, la querellada y letrada M. T. G. I., se separó. Y a los pocos meses, lo hizo del despacho profesional que compartían y que era propiedad de su exmarido. Desde antes de la ruptura las relaciones eran conflictivas y el divorcio ha seguido el mismo camino. La aportación de una serie de documentos por parte de la mujer, a través de su abogada, ha provocado ahora el pleito penal. Primero, el juzgado no admitió la querella, pero la Audiencia de Barcelona estimó el recurso del perjudicado y ordenó que se investigara.

El exmarido acusa a la que fue su esposa de apoderarse «indebidamente», en «más que probable cierta connivencia» con su abogada, la también querellada R. B. R., de documentos personales y otros que afectaban a terceras personas. Estos papeles fueron aportados al proceso de divorcio sin ningún tipo de autorización y con «la espuria meta de obtener réditos de corte bastardo».

MATERIAL CONFIDENCIAL

Entre los documentos que la mujer se llevó del despacho de su exmarido figuraban también las rentas personales de este, que después se usaron en la demanda de divorcio y fueron facilitadas a terceros para hacer informes periciales. Por eso, la querella relata que se ha divulgado material confidencial, por lo que podría haberse cometido un delito.