El pleno Consejo de de Seguridad Nuclear (CSN) rechazó la petición de la mayoría de los partidos políticos de frenar cualquier decisión sobre la reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos, pero especificó que el informe final no se emitirá hasta el segundo semestre. Todas las formaciones a excepción del PP habían pedido que se paralizaran los trámites mientras el Gobierno esté en funciones. Tras el informe final del CSN, la palabra definitiva la tendrá el Ministerio de Industria. Los partidos remitieron el martes por la noche una carta al presidente del CSN en la que se le recuerda que "Garoña está parada desde diciembre de 2012, por decisión unilateral y voluntaria". "Esta situación de parada no ha supuesto ningún problema para el suministro eléctrico y podría seguir en esta situación unos meses más", dice el escrito. Los partidos piden "que el CSN detenga temporalmente el proceso de evaluación de la autorización de renovación de explotación de Garoña, hasta la formación del nuevo Gobierno al que corresponda la decisión final" sobre si se le concede la reapertura.