La nueva regulación de los drones que reclama el sector desde hace años está a punto de hacerse realidad. El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, anunció ayer en el Congreso que antes de final de año se aprobará un decreto que permitirá el vuelo de estos aparatos en las zonas urbanas y en las aglomeraciones, y los vuelos nocturnos, algo que ahora está prohibido y que limita el despegue de esta tecnología en España.

El decreto, que actualmente estudia el Consejo de Estado tras superar el trámite de dos audiencias públicas, permitirá también operar drones fuera del alcance visual del piloto, otra de las limitaciones a que está actualmente sometido su uso. El ministro detalló que la nueva normativa establecerá una clasificación de las aeronaves, los requisitos de certificación, las limitaciones para su uso en aquellos casos que no se requiera certificación y las condiciones para poder usar el espacio aéreo. Habrá que ver cómo se han resuelto en el texto los riesgos de accidentes, la posible intromisión en recintos privados y la amenaza de uso por parte de terroristas, tres de los principales riesgos de la nueva tecnología, que también están en fase de análisis por parte de la Unión Europea (UE). La interferencia de drones con los aviones en las proximidades de los aeropuertos es también una amenaza que preocupa al sector aeronáutico.