Un cohete Falcon 9 no tripulado y una cápsula Dragon pertenecientes a la empresa privada Space Exploration Technologies (SpaceX) han despegado este martes de la Estación Aérea de Cabo Cañaveral (en el estado norteamericano de Florida) en un nuevo ensayo con vistas a su futura utlización para la Estación Espacial Internacional (ISS).

Se trata de la primera misión espacial de una empresa privada para la ISS, un proyecto orbital valorado en 100.000 millones de dólares (78.000 millones de euros) y en el que participan 15 países.

La Agencia Espacial norteamericana (NASA) ha contratado a SpaceX, al igual que a otras cuatro compañías, para el transporte de cargamentos y eventualmente astronautas a la ISS, tras la finalización, el pasado verano, del programa de transbordadores espaciales del organismo estadounidense.