El pasado domingo por la tarde me enteré de la muerte en Barcelona del insigne lingüista Dr. Antoni Badía i Margarit. Artur Quintana, amigo y discípulo aventajado del Dr. Badía, que dirigió su tesis doctoral sobre El parlar de la Codonyera, lo recuerda en un texto en "en castellano ausnahmsweise", que traduzco "como excepción".

"Badía --escribe Quintana-- trabajó en todos los campos de la lingüística románica, en especial del catalán, del aragonés y del castellano. Su tesis doctoral trata de los adverbios pronominales en las lenguas románicas de la Península. En ella se anunciaban los temas de los que se ocuparía: gramática histórica y actual, morfosintaxis histórica y actual, dialectología. Y eso es lo que hizo con el catalán en sus monumentales gramáticas : a) Gramática histórica de la lengua catalana (1950), que no sería únicamente una gramática histórica, sino también un excelente manual de fonética y un no menos excelente de dialectología catalana ; y b) Gramática catalana (1962) dedicada a la lengua actual. Hasta aquí se trataba de obras que seguían la gramática tradicional.

Luego se ocupó de la lengua catalana desde el enfoque de la gramática estructural y profundizó en su historia, destacando la contraposición de un catalán occidental menos romanizado frente al oriental más fiel al latín. Después se adentra en sociolingüística con las primeras grandes encuestas: La Llengua dels barcelonins, y funda el Grup Català de Sociolingüistica. De su iniciativa surge también el Nou Atles Lingüístic del Domini Català. Su trabajo sobre la lengua aragonesa comienza con su tesis doctoral y continúa con la monografía sobre el aragonés belsetano. Tuvo la inmensa suerte de poder estudiarlo cuando se hablaba aún en todo el valle de Bielsa. Badía perteneció al grupo de investigadores catalanes que supieron unir ciència i passió, trabajo de campo y excursionismo. Badía escribió bien y mucho de casi todo en lingüística. A veces se quejaba de haber sido demasido tastaolletes. Fue rector de la Universidad de Barcelona en años difíciles (1978-1986) y dio la talla como home de pacte y buen diplomático".

Yo conocí al Dr. Badía en l986, en la presentación del II Congrés de Llengua Catalana en el castillo de Valderrobres. Después de cesar de mi cargo escribí un libro sobre lo que hicimos en la Franja: roturar y comenzar a cultivar un campo abandonado, introducir la enseñanza del catalán en las escuelas. Y todo para llegar a LAPAO, ¡que pena!

Pero esa pescadilla que se muerde la cola no detiene la historia, y la lengua que viene de lejos seguirá su curso. El Debat del català a l'Aragó 1983-1987 se publicó con un prólogo del Dr. Badía. Gracias, Maestro. Seguimos con la esperanza que nos dejas.