Margalida Garau, la madre de la niña Nadia Nerea, para cuyos cuidados por enfermedad han pedido dinero durante años ha afirmado en Antena 3 TV que hayan desviado fondos para nada que no fuera el tratamiento de la pequeña. La mujer accedió a responder a las preguntas de los periodistas presentes en el programa Espejo Público, que presenta Susanna Griso, cuando era su marido,Fernando Drake Blanco, quien se había comprometido a dar explicaciones.

La mujer justificó la ausencia de su pareja en que había sido "citado a declarar por el juez" a última hora. Fuentes judiciales han desmentido a este diario que el juez de La Seu que investiga el caso le haya citado a declarar este miércoles "ni a él ni a nadie" pues está a la espera del análisis de las cuentas corrientes bloqueadas y de los informes médicos que ha requerido a la familia de la niña. Los Mossos d'Esquadra por su parte se han escudado en el secreto de actuaciones para no confirmar ese extremo aunque han añadido que si hay alguna actuación es por orden del juez.

"Juro por mi vida que no hemos usado dinero para nada que no fuera el tratamiento de la niña", ha afirmado Garau. La mujer se escudó en la "confianza plena" en su marido durante todo el interrogatorio. Incluso cuando los tertulianos la obligaron a escuchar las declaraciones de Drake admitiendo que "iba a pinchar la burbuja" y que había "exageraciones" en su relato de sus viajes a ver un experto "a una cueva en Afganistán", a tratamientos extraños y sobre su esperanza de vida, entre otras cuestiones.

La mujer también negó que hubieran consensuado la versión ante los medios de comunicación ni que en algún momento fueran a admitir los engaños. Griso, que los había tenido en su programa en varias ocasiones, le reprochó que se habían basado siempre en la "confianza" y que les conocían "desde hace años". Garau se ha disculpado por "si la gente se había sentido engañada" y ha asegurado que "devolverán todo el dinero". Las cuentas de la pareja y de la asociación Nadia Nerea están bloqueadas por orden judicial.

"Que se hizo mal, sí, pero de estafadores no", sostuvo Garau, a quien tuvieron que advertir de que si se demostraba que habían estafado, podría enfrentarse a una pena de seis años de prisión y a una posible retirada de la custodia de la niña. "Es Fernando el que iba a los médicos y yo me fiaba de lo que decía él", afirmó.

Garau se negó tajantemente a hablar con la periodista Ángela Bernardo, que destapó parte de las mentiras de la pareja en Hipertextual. Y justificó que su marido trabajaba "dando charlas de motivación y con los vinos, haciendo catas".