Un estudio realizado por Azenta Salud España, empresa nacida de la Fundación Humanismo y Ciencia para el tratamiento sintomatológico de la fibromialgia a través de pulsos elecromagnéticos, mediante el sistema RBF-01, reduce de manera significativa la sensación dolorosa de los pacientes mejorando así su calidad de vida. Según el informe el tratamiento tiene una efectividad del 96 por ciento en reducción de dolor.

Azenta Salud cuenta con clínicas en Madrid, Sevilla y en Zaragoza, siendo esta última la primera que abrió --el 23 de junio de 2008-- y la primera también en presentar resultados estadísticos de su tratamiento, en un ensayo clínico realizado con 50 pacientes. Los síntomas de esta patología son cansancio, dolores musculares, jaquecas y migrañas y trastornos en el sueño como insomnio y pesadillas que a, su vez, incrementan el cansancio y los dolores musculares.

Aunque se hayan catalogado los síntomas, las causas de la enfermedad son desconocidas. Además, al no tener síntomas específicos, es muy difícil de diagnosticar. Antes de llegar a la conclusión de que se sufre fibromialgia los pacientes pasan por multitud de pruebas para descartar otra patología que produzca esos síntomas, proceso que muchas veces lleva hasta seis o siete años, añadió Franco. De la misma manera que no se conocen las causas, tampoco existe un tratamiento para su curación por lo que, según Franco, el único tratamiento actual para esta enfermedad es el de paliar los síntomas.

Los resultados presentados en Azenta sobre cincuenta primeros pacientes, indican que el tratamiento ha producido una reducción del dolor en el 96 por ciento de los tratados. El dolor se mide objetivamente mediante algómetros. La efectividad en las cefaleas es algo menor, situándose en el 82 por ciento. Según la responsable de la clínica de Zaragoza, la doctora Eva Soro, esto se debe, en parte a múltiples factores que afectan a las cefaleas además de la propia fibromialgia.

Por otra parte, el 70 por ciento de los pacientes, según el informe, han mejorado sensiblemente su calidad de sueño. El tratamiento de Azenta mediante campos electromagnéticos es indoloro y no tiene efectos secundarios adversos, añadió el doctor Alberto Franco. El tratamiento se realiza en una cabina de faraday --que aísla de las ondas electromagnéticas-- y realizando una serie de pulsos electromagnéticos a través de una bovina colocada en la cabeza.

Los pulsos electromagnéticos que se envían modulan el sistema neuronal del impulso doloroso en el cortex. El tratamiento se aplica en sesiones semanales de 20 minutos de duración durante cuatro semanas. El tratamiento no es curativo, los síntomas vuelven a aparecer en un plazo mínimo de tres o cuatro meses, aunque, al principio más suaves.

El precio del tratamiento es de 50 euros por el diagnóstico y 100 euros por cada sesión. Al no ser invasivo, se pueden realizar varios tratamientos al año, aseguró el doctor Alberto Franco. El responsable Azenta, el doctor Alberto Franco, explicó en rueda de prensa que la fibromialgia es una enfermedad que sufre entre el 2 y el 4 por ciento de la población, siendo mujeres el 80 por ciento de los afectados. En el ensayo clínico de Zaragoza se trato a 47 mujeres y 3 hombres.

Este tratamiento de Azenta cuenta con el certificado de la Comunidad Europea de Garantía de Calidad de la Calidad de la Producción emitido por la Agencia Española de Medicamentos y productos Sanitarios.