El papa Francisco lamentó el sábado la falta personal para poder agilizar los procesos por los casos de curas pederastas, de los que dijo que "hay 2.000 amontonados", durante la rueda de prensa en el vuelo de regreso de su viaje al santuario portugués de Fátima.

Al respecto, explicó que se está estudiando la creación de unos "tribunales continentales", que se instalarían en varias ciudades de cada continente para ocuparse de los correspondientes casos yacelerar las decisiones.

Francisco lamentó ante los 70 periodistas que le acompañaron en este viaje la salida de Mary Collins de la comisión para la protección de menores que él mismo creó. Collins había sido víctima de abusos en su infancia por parte de un sacerdote.

Collins abandonó esta comisión, lamentó los retrasos en sus gestiones y acusó a la Congregación para la Doctrina de la Fe de crearobstáculos para las decisiones del Papa, como la creación de tribunales específicos para estos casos. "Es una buena mujer y un poco tiene razón", aseguró Francisco.

SOLVENTAR LOS RETRASOS

Francisco explicó las dificultades para realizar los protocolos que hay que enviar a cada diócesis y reconoció que "hay poca gente, se necesita más gente capaz de hacer esto y se han admitido otras dos o tres personas más".

Explicó que está tomando medidas para solventar los retrasos, como el nombramiento de otro director de la oficina disciplinaria. Confesó que a veces a quienes "se les retira del sacerdocio" presentan un recurso y los tiempos se alargan. Al mismo tiempo, aseguró que, aunque los sacerdotes acusados pueden pedir una "gracia", él nunca ha firmado una. "Estamos caminando, pero hay 2.000 casos amontonados y nos queda mucho trabajo", señaló.