En un gesto altamente simbólico en favor de la reconciliaciónen la República Centroafricana, el papa Francisco ha visitado este lunes la mezquita central de Bangui, en el barrio PK-5, escenario de atrocidades durante las masacres intercomunitarias ocurridas a finales del 2013.

"Cristianos y musulmanes son hermanos y hay que decir 'no' a la venganza, la violencia y el odio", ha afirmado a la llegada a la mezquita, en la última jornada de su gira por el continente africano.

La reconciliación entre las comunidades musulmana y cristiana ha sido el tema central del periplo africano del Pontífice, que le llevó también a Kenia y Uganda. Pero es en la República Centroafricana donde su llamada a la paz y la reconciliación adquiere mayor significado. Miles de personas han muerto y cientos de miles han sido desplazadas por los enfrentamientos entre las dos comunidades.

PK-5, la zona donde se han refugiado la mayoría de musulmanes que no han huido de Bangui, está cortada del resto de la capital desde hace dos meses.