La Fiscalía de Álava ha pedido un total de 59 años de cárcel para el padre, la abuela y tres tíos de una chica que presuntamente sufrió violaciones, agresiones sexuales, maltrato y lesiones de forma continuada desde que tenía 6 años y hasta que cumplió los 26. Según el Ministerio Público, los hechos se remontan a 1994. A partir de entonces, y hasta el 2001, cuando la menor tenía 13 años, su padre, «de forma habitual y reiterada», le hacía tocamientos, la violó, le obligó a practicarle sexo oral y la agredió con tal de conseguir que accediera a mantener relaciones sexuales con él. Además, la amenazaba para que no lo contara.

Cuando la víctima tenía 17 años, su padre la echó de casa y dos años más tarde, en el 2006, la joven se fue a vivir con su abuela paterna y sus tres tíos. Durante 7 años, hasta noviembre del 2013, la joven sufrió por parte de su abuela un trato «absolutamente vejatorio», según el fiscal. La abuela se dirigía a ella con expresiones como «hija de puta» y «puta ladrona, eres igual que tu madre», además de increparla con frases como «te quieres follar a mis hijos».

La mujer «esclavizaba» a su nieta al obligarla a hacer los recados de toda la familia y las tareas domésticas, le privaba de comida o de productos básicos de higiene, le tiraba su ropa al váter y mantenía un control férreo sobre ella, además de agredirla habitualmente con tirones de pelo, puñetazos, arañazos, patadas y pinchándole los glúteos con una aguja de coser.

Uno de sus tíos, que dormía con ella en la misma habitación, le hacía tocamientos hasta tal punto que durante los 7 años que vivió en esa casa «se despertaba prácticamente todas las noches» debido a los abusos sexuales que padecía, asegura el fiscal. Otro de los tíos aprovechaba las situaciones en que el resto de la família se iba de casa, para abusar también de ella y el tercero la agredía e insultaba de forma habitual, aunque no consta que abusara de ella sexualmente.

La fiscalía, que señala que la víctima nunca recibió atención médica tras las agresiones, pide 18 años de cárcel para el padre, 16 años para uno de los tíos, 13 para otro y 6 años tanto para la abuela como para el tío que la maltrató. Además exige que ninguno de los procesados pueda acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante 10 años y que la indemnicen con 100.000 euros por los daños morales causados, importe que se sumará a la cantidad que se determine en el juicio, una vez que se conozca el informe forense sobre las lesiones psíquicas padecidas.