Un total de 40 trabajadores de Eulen en el aeropuerto de El Prat de Barcelona cogieron ayer la baja médica, unas ausencias que neutralizarían el refuerzo de los 60 efectivos que la compañía destinó para minimizar las colas de los últimos días.

Aunque fuentes conocedoras del conflicto laboral cuantificaron en una cuarentena los trabajadores que están de baja, la empresa Eulen se limitó a confirmar que hay «un número importante» de empleados en esta situación actualmente.

La plantilla, de unos 360 empleados, se encuentra inmersa en un conflicto laboral con la empresa Eulen, a quien reclama una subida salarial de hasta 350 euros por trabajador, además de un refuerzo de personal. Tras cuatro sesiones maratonianas de mediación con la Generalitat de Cataluña, Eulen aceptó ayer la propuesta del Gobierno catalán, que consiste en subir hasta 200 los sueldos y sumar un quinto vigilante a cada filtro de seguridad.

Hoy, la asamblea de trabajadores de la compañía debe decidir si se adhiere o no a esta propuesta, mientras ayer seguían las colas en las dos terminales de El Prat.

LAS MISMAS ESPERAS / Ayer hubo dos nuevos picos, a primera hora y a media mañana, en las que los pasajeros tuvieron que esperar hasta una hora para pasar el arco de seguridad.

La nueva convocatoria oficial de huelga es el próximo viernes, día 11, cuando hay programados cuatro paros parciales de una hora y, a partir del lunes, 14 de agosto, la plantilla amenaza con hacer huelga indefinida de 24 horas.

Eulen ganó el concurso de Aena para gestionar los controles de seguridad del aeropuerto catalán, que son los primeros filtros que encuentran los pasajeros al llegar antes de acceder a la zona de embarque, con una dotación de más de 23 millones de euros. Este verano recibió 450.000 euros extras para garantizar el servicio en la campaña de estival.