Alrededor de un centenar de activistas han roto banderillas este miércoles en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona para denunciar el "infierno" que suponen las fiestas de San Fermínpara los toros (que empiezan el jueves) y para pedir "valentía, justicia, solidaridad y empatía" a los políticos.

Los activistas han ido accediendo a la plaza del Ayuntamiento desde lacuesta de Santo Domingo, unos con camisetas en las que se leía: 'Yo quiero un sanfermín sin sangre' y otros con el torso descubierto con lemas como: 'Stop tauromaquia', en diferentes idiomas.

Una vez en el centro de la plaza todos se han despojado de las camisetas, se han puesto unos cuernos y han cogido unas banderillas. Tras gritar "tauromaquia abolición", han abierto un polvo rojo, que simulaba ser sangre.

Mientras tanto, la directora de AnimaNaturalis en España, Aida Gascón, iba relatando los últimos minutos de vida de los toros que ha considerado "llenos de sufrimiento y tortura". "Por ellos, por los toros, estamos un año más en Pamplona denunciando el infierno que supone San Fermín para todos estos animales", ha sostenido, tras lo que ha subrayado que su acción, en la que participan activistas de diferentes comunidades autónomas y del extranjero, tiene como objeto "hacer visible la tortura a la que se somete a estos animales".

TORTURAS

Por todo ello ha pedido a los políticos "valentía, justicia, solidaridad, empatía y que se pongan en la piel de los más indefensos que están condenados a ser perseguidos por las mañanas de San Fermín y torturados hasta la muerte para que se divierta la gente".

Y ha recordado que es la decimocuarta ocasión en la que acuden a la capital navarra para protagonizar actos de protesta de este tipo. Además ha comentado que están recogiendo firmas, llevan ya casi 150.000, para pedir unas fiestas de San Fermín "sin sangre, sin corridas de toros que es la crueldad más visible de las fiestas".

La finalidad última es "denunciar cualquier forma de maltrato animal en fiestas y tradiciones", ha aseverado, tras lo que ha reconocido que los encierros de Pamplona son "muy tradicionales y merecen un debate más sosegado, pero las corridas de toros es algo que está ya superado y la mayoría de la gente rechaza".

En este sentido ha remarcado que no entienden "por qué se sigue permitiendo y subvencionando con dinero público un espectáculo cruel con los animales y que la mayoría de los españoles rechaza".