El rey Felipe llamó ayer a todos los españoles a trabajar, "cada uno con su propia personalidad, en un proyecto integrador, sentido y compartido por todos, y que mire siempre hacia adelante". Treinta y cuatro años después de su primer discurso público como príncipe de Asturias con motivo de la entrega de los premios homónimos, Felipe se dirigió ayer por primera vez a los más de 1.600 invitados que llenaban el Teatro Campoamor de Oviedo en su nueva condición de Monarca. Lo recordó nada más iniciar su discurso, lo que propició que fuera interrumpido por aplausos, lo que sucedió también cuando agradeció su presencia a la reina Sofía, elogió a los españoles que luchan contra el ébola o se refirió a las actuales tensiones políticas y territoriales. "Los españoles ya no somos rivales los unos de los otros. Somos protagonistas de un mismo camino", aseguró

Previamente, el Monarca glosó a los premiados de este año: el arquitecto Frank O. Gehry (Artes), autor del Museo Guggenheim de Bilbao; el hispanista francés Joseph Pérez (Ciencias Sociales), de quien elogió "el altísimo valor científico" de sus estudios sobre la edad moderna, y el padre de Mafalda, el dibujante argentino Joaquín S. Lavado, Quino, capaz de "transmitir valores educativos universales" con sus personajes.

También el químico español Avelino Corma (Investigación), premiado junto a los estadounidenses Mark E. Davis y Galen D. Stucky por las aplicaciones que sus trabajos han tenido en campos como la reducción de emisiones, la mejora de los alimentos y el refinado del petróleo; el escritor irlandés John Banville (Letras), "autor de prosa muy trabajada", y la periodista congoleña Caddy Adzuba (Concordia), por sus denuncias de las torturas y violaciones de las que son víctimas las mujeres y las niñas de su país. Y, finalmente, el programa educativo de intercambio Fulbright (Cooperación Internacional), patrocinado por el Gobierno de EEUU, y el maratón de Nueva York, "un auténtico ejemplo de la grandeza de avanzar juntos".

CAMBIO DE NOMBRE La anécdota de la jornada la protagonizó el Rey al anunciar que el próximo año, los premios de denominarán Princesa de Asturias. Fue al anunciar el cambio de la denominación cuando se le escapó que se denominarían "Príncipe... Princesa de Asturias", lo que provocó las risas de los asistentes y una cariñosa caricia de la Reina. La Casa del Rey pone especial cuidado en no fijar una edición concreta para que la actual Princesa los entregue y aboga por la calma.