40.000 SEGUIDORES"Benedicto XVI, te quiere todo el mundo", gritaban ayer en las puertas del estadio municipal de Pacaembú los que iban al encuentro del Papa. La "agenda moralizadora" de Josep Ratzinger tenía allí su específico capítulo juvenil. Unas 40.000 personas esperaban escucharlo en representación del sector social donde el aborto y todas las formas de violencia y discriminación causan verdaderos estragos.

CLANDESTINIDADTodos los años nacen en Brasil 2,7 millones de niños. Y un millón de mujeres abortan anualmente en el circuito clandestino, de las que 250.000 sufren severas secuelas por culpa de las intervenciones realziadas sin garantías sanitarias. Un reciente estudio de la Secretaría de Salud del Estado de Sao Paulo informa de que 105.000 "meninas"

de entre 10 y 20 años y por lo general pobres habían quedado embarazadas por hombres que suelen ser cinco años mayores de la jóvenes. La coordinadora de Salud Adolescente de esa secretaría, Albertina Takiuti, dijo que la falta de información sobre métodos anticonceptivos es el principal factor de la preñez.MADRES PRECOCESEl 85,5% de las chicas no quieren ser madres precoces. Patrícia Pereira dos Santos, de 18 años, contó en Folha de Sao Paulo

que está esperando su segundo hijo. El primero lo tuvo a los 15 años. Entonces "no tenía noción" de la palabra preservativo. El padre de la futura criatura, tampoco. Y cuando se enteró de la noticia dijo que "él no había sido". Por eso desapareció. En cambio, Lucimara dos Santos, de 17 años, decidió abortar. A la semana de perder la virginidad ya había quedado embarazada.