La empresa estadounidense SpaceX, de Elon Musk, lanzó este jueves por la noche su primer cohete reciclado (la primera parte ya había volado), un hito impresionante en la búsqueda de la compañía para reducir los costos de lanzamiento para que un día los humanos puedan realizar vuelos espaciales y colonizar Marte.

La nave que transporta un satélite de telecomunicaciones de la firma luxemburguesa SES despegó de su plataforma del Centro Espacial Kennedy, tal como estaba previsto, a las 18.27 local, con un cielo despejado. El primer piso, de 41 metros de altura, que se separó del resto del cohete 2 minutos y 41 segundos después del despegue, volvió a posarse suavemente sobre una plataforma flotante en el océano Atlántico 8 minutos y 32 segundos después del lanzamiento. El satélite debía desplegarse 32 minutos después del despegue. El primer piso reciclado había servido para el lanzamiento, en abril del 2016, de la cápsula Dragon hacia la Estación Espacial Internacional (ISS) en una misión de aprovisionamiento en el marco de un contrato con la NASA.

"Esto finalmente será una enorme revolución en los vuelos espaciales", dijo Musk durante una transmisión por Internet desde el centro de control de misión en Cabo Cañaveral inmediatamente después del aterrizaje autónomo del Falcon 9. "Han pasado 15 años para llegar a este punto", agregó.

MARTE, EL OBJETIVO

Musk dijo que la próxima meta de su compañía en la floreciente industria de los vuelos espaciales comerciales será habilitar un propulsor reacondicionado para que despegue nuevamente dentro de 24 horas. En diciembre del 2015, SpaceX aterrizó por primera vez un cohete orbital después de su lanzamiento, una hazaña que ya ha repetido ocho veces. Con la reutilización de cohetes, SpaceX busca reducir sus costes en alrededor de un 30%, según ha dicho la compañía.

La empresa ha indicado que el valor por operar un Falcon 9 es de 62 millones de dólares, pero aún no ha anunciado el precio por volar un cohete reacondicionado. SpaceX también trabaja en un vehículo espacial de pasajeros y dos turistas no identificados ya se inscribieron para un viaje futuro alrededor de la Luna. El objetivo a largo plazo de la compañía, de acuerdo a Musk, es transportar a gente a y desde el planeta Marte.