Han pasado cinco años y el panorama es igual de desalentador. Desde julio del 2003 a julio del 2004, las responsables de la Federación de Mujeres Progresistas (FMP) han encontrado en los medios de comunicación 80 sentencias machistas. Es decir, benévolas con agresores de mujeres porque les rebaja o minimiza la pena. La cifra es similar a las registradas en los años anteriores.

El estudio de la FMP --que tiene como fuente de información las noticias de prensa-- "no tiene ninguna pretensión jurídica", según explicó ayer su presidenta, Enriqueta Chicano. El objetivo es, simplemente, alertar sobre la "falta de concienciación y formación" de algunos jueces.

El informe ofrece algunos casos llamativos. Por ejemplo, el de Latifa Daghdagh, una mujer de 22 años que acusó a su marido de maltrato. El titular del Juzgado de lo Penal número 22 de Barcelona consideró que no había suficientes pruebas para condenar al hombre y, además, negó que el perfil de la víctima correspondiera al de una maltratada porque, entre otras cosas, "vestía a la moda y, además, llevaba anillos, curiosos pendientes y gafas grandes".

SIN INTIMIDACION La Audiencia de Barcelona absolvió a un hombre, que había sido condenado anteriormente a seis meses de prisión por insultar y vejar a su mujer. El tribunal negó la habitualidad y esgrimió que el acusado sólo convivía con su pareja en Navidad y vacaciones. Ese mismo juzgado, según el informe de las feministas, aseguró que no había intimidación en el caso de un hombre que abusó de las dos hijas --de 16 y 8 años-- de su compañera.

Otro hombre fue condenado sólo a pagar 90 euros a su víctima, a la que golpeó e intentó prender fuego con un mechero. El tribunal que lo juzgó consideró el atenuante de intoxicación etílica y, además, alegó que el hombre era insolvente.

Tras hacer un resumen del informe, Chicano insistió en la necesidad de que los jueces, los abogados, los fiscales y todos los profesionales que trabajan con mujeres tengan formación especializada, como prevé la futura ley antimaltrato.

Además, la presidenta de la ONG hizo una defensa a ultranza de los juzgados específicos, también previstos en la normativa. Los futuros Juzgados de Violencia sobre la Mujer son precisamente uno de los escollos de la norma. Los jueces conservadores los rechazan de plano ya que, a su juicio, se trata de una "jurisdicción especial por razón del sexo de una de las partes, algo propio del Antiguo Régimen". Los magistrados progresistas, por el contrario, opinan que no se trata de tribunales especiales sino especializados, como los mercantiles.

La presidenta de Mujeres Progresistas comentó que las sentencias machistas incluidas en el informe son emitidas, a partes iguales, por hombres y por mujeres. El estudio recoge sentencias de todo tipo de delitos sexistas (abusos y acosos sexuales) y no sólo de violencia doméstica. Carmen Laviña, de la FMP, destacó que el lugar donde se dan con más frecuencia las agresiones es el domicilio común, seguido de la calle, el hogar de la víctima y el del agresor. Este, en la mayoría de casos es el marido, el novio o el ex de la víctima.