En la actualidad, el hospital Militar ofrece atención sanitaria especializada a alrededor de 51.000 personas, repartidas en las zonas de salud de Casablanca (9.886 tarjetas sanitarias), Valdespartera (25.716) y Seminario (16.078). A partir de la entrada en vigor del convenio, la cobertura se ampliará alrededor de un 30%, ya que los beneficiarios pasarán a ser más de 66.000, procedentes de barrios del sur de la capital aragonesa, como Montecanal o Rosales del Canal, zonas en expansión.

El hospital se destinará casi exclusivamente a pacientes del Salud. Sin embargo, una pequeña parte de las instalaciones continuarán siendo para militares, aunque, según indicaron ayer fuentes del Departamento de Sanidad, se trata de un porcentaje «muy pequeño» y generalmente personas mayores. De este modo, el centro sanitario pasa de ser considerado un hospital complementario a sustitutorio, algo similar a lo que ocurrió en su día con el Royo Villanova.

Aunque algunas fuentes de la Administración aseguran que el convenio entre el Gobierno de Aragón y el Estado está ya firmado, su ejecución debe aguardar todavía al visto bueno procedente del Ministerio de Administraciones Públicas. Se trata de un requisito indispensable cuando se trata de acuerdos entre instituciones públicas. En todo caso, Sanidad ya ha empezado a acometer actuaciones destinadas a la completa integración del hospital de la Defensa, como la implantación de la interconsulta virtual, un recurso que evita derivaciones.