Nadie se salió del guion en el encuentro entre el Consejo Empresarial de CEOE Zaragoza y el alcalde de la ciudad, Pedro Santisteve. Tanto el presidente de los empresarios como el regidor de la capital aragonesa se mostraron cercanos y en sintonía, a pesar de las voces que en los últimos días acusaban al Gobierno municipal de Zaragoza en Común (ZeC) de ralentizar importantes proyectos e inversiones en la ciudad. El alcalde les pidió tiempo, ante la apuesta de ZeC de repensar el modelo de ciudad. El presidente de CEOE Zaragoza, Ricardo Mur, insistió en que "respetan los tiempos del Gobierno municipal, que es quien tiene la legitimidad desde el punto de vista democrático para impulsar estos proyectos".

Aun así, Mur recordó que al competir en una economía globalizada y de mercado como la actual, "conseguir que haya empresarios que apuesten por Zaragoza requiere también de ese compromiso institucional que suponga que los plazos hagan viables esos proyectos". Es decir, le piden agilidad al equipo de Gobierno: "Nos gustaría que fuesen más rápidas algunas decisiones".

CREAR EMPLEO

Esa fue, ante los micrófonos, la mayor vuelta de tuerca. Pero Mur subrayó el poder de los empresarios, como impulsores de la creación de empleo, y apostó por seguir reuniéndose para llegar a acuerdos y "lograr generar más proyectos empresariales que creen empleo".

El alcalde se mantuvo firme en su defensa de un nuevo modelo que impulse la ciudad consolidada frente al pelotazo. No obstante, no se comprometió a agilizar esos plazos que puedan amarrar las inversiones. Es prioritario decidir, para el primer edil, si se apuesta "por un desarrollo especulativo, a corto plazo" o por lo que, afirmó Santisteve, encontró allí, "gente que vive aquí, que se preocupa por la ciudad y que son unos estupendos embajadores de Zaragoza".

Ante las acusaciones de estar paralizando cuatro proyectos que suponen la llegada de cientos de millones de euros a la capital aragonesa, el alcalde manifestó que "estamos cumpliendo con la legalidad, pagando a nuestros proveedores e intentando poner sobre el tapete el modelo de ciudad que nos hemos encontrado y si es el mejor o habría que reconducirlo a volver a la ciudad consolidada".

Santisteve reconoció que hay algunos proyectos que "están a debate, porque chocan con los intereses de parte de la ciudad". Y que, por el momento, el Gobierno está intentando "componer esos intereses para que todo el mundo salga ganando, aunque hay veces que no se puede contentar a todos".

El alcalde dejó claro que va a alejarse de determinados desarrollos urbanísticos que le cuestan mucho dinero a las arcas municipales en materia de servicios o de transporte y, en este sentido, lo que "no puede ser", expresó, es que se incida en "determinadas dinámicas en las que el ayuntamiento ponga todo una vez que alguien ya ha rentabilizado su beneficio económico".

Eso sí, hay una prioridad incontestable para el Gobierno municipal. Dados los "escasos" recursos de las arcas municipales, atender la "emergencia social", es algo que cumplirán "sí o sí", insistió Santisteve. Por otro lado, indicó que ya han empezado a marcar su apuesta. "Aportamos ya al modelo de ciudad desde el punto de vista de innovación, con los convenios con la universidad, la colaboración público-privada, la economía verde, la eficiencia energética y la rehabilitación de viviendas". Falta conocer cómo encajan los proyectos empresariales en este nuevo modelo urbanístico.