Alfredo Zaldívar, presidente de la Ribera Alta del Ebro, la comarca más afectada por la riada, ha visto desde primera línea los daños de la crecida.

--¿Cuál es el panorama ahora que baja el caudal?

--Los efectos de la riada tardarán en superarse. El Ebro ha ido rebanando las motas y sigue pasando mucha agua al otro lado de las defensas. En muchos pueblos, como Cabañas, Alcalá y Boquiñeni, hace poco aún seguía saliendo agua en las casas. Además, muchas huertas siguen sumergidas. Y esta situación significa que se tardará mucho tiempo en volver a la normalidad.

--Una foto publicada ayer en la portada de EL PERIÓDICO DE ARAGÓN muestra cómo el Ebro se ha desbordado aguas arriba y abajo de Zaragoza, mientras que pasa más encauzado por la capital. ¿Qué opinión le merece?

--Me da vergüenza. Zaragoza está en mejores condiciones. Tiene una caja impresionante y siempre ha sido así, aunque el río no deja de ganar terreno por eso. Hay que tener en cuenta que ha habido mucha especulación, se ha ganado terreno al río.

--¿Ha habido descoordinación en la lucha contra la riada?

--Los diferentes cuerpos que han actuado han hecho todo lo que han podido, desde los bomberos a la UME. Ahora bien, al principio, la gente de los pueblos estuvo sola y tuvo que reaccionar con sus medios. En cambio, al llegar a Zaragoza la riada se tomó en serio.

--La ministra Tejerina dijo que con Yesa recrecido y Biscarrués se podría haber evitado.

--No estoy de acuerdo con lo que dijo la ministra de Agricultura. Para empezar, el embalse de Biscarrués está en la cuenca del Gállego. Y, por otro lado, recrecer un embalse como Yesa supone también aumentar la capacidad de agua que se mantiene en reserva. Luego, en caso de avenida, seguirá existiendo el problema de eliminar ese plus de agua embalsada sin causar daños, con el fin de poder laminar el caudal en la presa. Si se retiene el 80% del agua, para luego destinarla al consumo humano y a los regadíos, el efecto será el mismo.

--¿Le ha sorprendido la magnitud de esta crecida?

--Es una de las más graves que ha padecido el Ebro. Multiplica por cinco la que se registró en el 2003. Nada más hay que ver el alcance de las pérdidas y el hecho de que el agua haya llegado más lejos que otras veces. Ha afectado a cascos urbanos, ha partido carreteras, se ha llevado metros y metros de acequia, ha desmoronado las motas...

--El líder de su partido, Pedro Sánchez, visitó la zona y pidió un dragado integral. ¿Está de acuerdo?

--Totalmente. Dragar el río de forma integral puede ser la solución. Es necesario que el río recupere su capacidad de desagüe. Hay que insistir en que no se incumple la normativa medioambiental cuando lo que se trata de proteger son las vidas y las propiedades de las personas que viven junto al Ebro. Además, es preciso tener en cuenta que el ecosistema del río ha cambiado mucho estos últimos 40 años.

--¿Cómo están los habitantes de la Ribera Alta? ¿No se cansan de ser víctimas de una riada tras otra?

--Existe miedo a que vuelva a pasar otra vez, a que el deshielo pueda originar nuevas situaciones de peligro. Hay que buscar una solución rápidamente. El río está ahora mismo como cegado, con el lecho cada vez más alto por la acumulación de gravas y limos. Por eso hay que cometer la limpieza de inmediato.