La llegada de la crisis en el 2007 provocó que la gran mayoría de españoles se tuvieran que apretar el cinturón para llegar a final de mes. Los ciudadanos comenzaron su ahorro en aspectos como el ocio y el turismo por lo que este último, se vio realmente afectado. Sin embargo, esto incitó a que los usuarios idearan nuevas fórmulas para viajar, de tal forma que a partir del 2010, se puso de moda intercambiar las viviendas entre las distintas partes del mundo.

Es el caso de Gonzalo, que hace un año se inscribió en la red social Guest To Guest para ofertar su segunda residencia ubicada en la localidad oscense de Benasque. «He intercambiado mi casa en tres ocasiones. La primera vez fui a San Sebastián, después a Santander y la última vez me fui a un pueblecito de La Rioja», recordó.

BUENAS CRÍTICAS

El zaragozano está «contento» con el servicio que proporciona este portal en internet y sus experiencias «siempre han sido buenas tanto las tres veces que he viajado yo como las que han venido y el intercambio no ha sido recíproco».

Además, después de cada viaje, la entidad proporciona un espacio en el que los usuarios deben valorar la estancia y «valorar cómo te has sentido allí» lo que «genera una gran confianza a la hora de escoger un destino, porque te fías de las críticas y comentarios que tenga».

Una opinión que comparte el barcelonés, Quim, que hace dos años inscribió su segunda residencia, ubicada en Forcat (Huesca), y tras sus buenas experiencias, decidió apuntar su vivienda de Barcelona. Aunque reconoció que al principio «estaba un poco expectante porque no sabía lo que me podía encontrar en cada viaje».

«Me decidí por esta plataforma porque, después de mirar por internet, me di cuenta de que esta es la única en la que no había que abonar un importe por la inscripción y yo no tengo ninguna queja porque todos mis viajes han salido bien», señaló.

El barcelonés indicó que la mayor parte de turistas que acoge su vivienda oscense, son franceses porque buscan la montaña y «es un lugar situado en una zona muy solitaria y donde se respira mucha paz».

«Ahora, por ejemplo, estoy en Finlandia gracias a Guest To Guest y cada verano y puente festivo repito», apuntó.