El Gobierno de Aragón anunció ayer una nueva línea de ayudas públicas a la rehabilitación de viviendas. En esta ocasión está destinada únicamente a las casas unifamiliares de pueblos de pequeño tamaño. Según indicó el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, el objetivo que se persigue es el de «mejorar la calidad de vida de sus habitantes» y «atraer a nuevos pobladores o nuevos recursos».

El departamento encara esta convocatoria con fondos propios y se destinarán 1.690.530 euros. La ayuda cubrirá el 50% del coste de las obras y no podrá superar los 12.000 euros por casa o los 8.000 euros en el caso de edificios con dos o más viviendas. Se convoca para obras ejecutadas a lo largo del 2017 que estén terminadas ante del 15 de noviembre.

El consejero destacó que con esta convocatoria se busca llegar a un perfil de la población tradicionalmente olvidado en este tipo de ayudas. «Queremos que también sea una herramienta para los sectores más envejecidos», indicó. Para lograrlo se ha simplificado al máximo la convocatoria y se espera que los pagos estén tramitados en diciembre. El plazo de presentación de solicitudes se extiende desde el 30 de octubre al 16 de noviembre, ambos incluidos.

ASCENSORES Y RAMPAS

Entre las obras que se financiarán destacan las actuaciones de conservación (estructura, cimentaciones, cubiertas, cerramientos exteriores o fachadas), de accesibilidad (ascensores, rampas, plataformas elevadoras y actuaciones específicas para discapacitados o mayores de 65), y de rehabilitación energética (mejora del envolvente para reducir la demanda de climatización o sistemas de calefacción o ventilación).

En el caso de las viviendas familiares en bloque, más habituales en los municipios de mayor población, la DGA pretende subvencionar actuaciones de accesibilidad en el interior de la vivienda, incluyendo su posible adaptación a condiciones específicas para personas mayores o discapacitadas, y de rehabilitación energética. En este caso será fundamental que los trabajos se hayan realizado en una vivienda habitual. Para las casas en los pueblos también se contemplan segundas residencias u hogares sin uso para evitar su deterioro completo.

Esta línea de financiación que afronta la DGA con fondos propios busca llegar a los territorios que quedan sin cubrir con el plan de rehabilitación y ayudas al alquiler que ampara el Ministerio de Fomento y para el que aporta la mitad de los fondos. Soro recordó que en Aragón, por sus características demográficas, una gran parte de la población vive en casas de este tipo. La orden definitiva de ayudas se publicará en el Boletín Oficial de mañana viernes.