El PP volvió a exigir a la responsable del albergue municipal, Luisa Broto, que actúe y ponga en marcha las medidas necesarias para evitar que se repitan los últimos sucesos registrados en las instalaciones, donde se está investigando una presunta violación de un usuario a una residente y donde se han contabilizado, en menos de seis meses, varias agresiones a empleadas. La concejala del PP Reyes Campillo criticó la falta de información por parte del Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) ya que tuvieron que conocer lo sucedido a través de los medios de comunicación. Lo mismo sucedió con la paliza que un hombre le propinó a un vigilante al tratar de defender a una mujer que estaba siendo agredida en el interior del Luis Buñuel.

«No quiero crear alarma social, como usted dice -en referencia a Broto- sino que quiero información», señaló tras preguntar por las medidas urgentes que está poniendo en práctica, a lo que ella misma se respondió: «Ninguna».

Broto, que recordó que ha mantenido dos reuniones con los grupos, acusó a la concejala conservadora de realizar un «discurso sesgado» y de pretender dañar la imagen del Gobierno. «No le interesa la resolución de este conflicto ni la agresión», declaró. La vicealcaldesa aseguró que no le preocupa el rédito político o la imagen que pueda proyectar como consecuencia de la acumulación de agresiones registradas en instalaciones municipales.

También la portavoz del PSOE, Lola Campos, instó a Broto a que actúe, y le tendió la mano para buscar una solución. Sin embargo, acusó a la concejala de no haber sabido gestionar de forma correcta este asunto.

La vicealcaldesa anunció que se va a enviar al departamento de relaciones laborales los informes de la Policía Local y de los técnicos para que evalúen si se cumplieron los protocolos de actuación y averiguar qué es lo que falló.