El Gobierno de Aragón cerró ayer su viaje de presión por las instituciones europeas con una sensación de optimismo y una reivindicación para el Gobierno de España. El presidente de la DGA, Javier Lambán, adelantó que la Comisión Europea triplicará sus aportes para la reapertura de la línea internacional de Canfranc y además señaló que la inclusión del ramal Zaragoza-Teruel-Sagunto en la planificación 2021-2027 no tendrá «ningún problema» siempre que se hagan los deberes. Por eso pidió al ministro de Fomento, José Luis Ábalos que se ponga manos a la obra. «España se tiene que comprometer con la financiación correspondiente», exigió.

La fecha clave para conocer el futuro del ramal turolense en el eje Cantábrico-Mediterráneo es el 13 de septiembre. Hasta ese momento está abierto el plazo de enmiendas a la distribución de fondos. «La posición del Gobierno de España fue clave para que este ramal no se incluyera y ahora tiene que ser clave para que se incluya», insistió.

ejecución más rápida // De forma paralela a esta reclamación, en una reunión con el director de Transportes de la Comisión Europea, Herald Ruijters, el Gobierno de Aragón trató de poner sobre la mesa «argumentos sólidos» para que la comunidad tenga un papel de relevancia en los nuevos ejes transfronterizos de la UE. Lambán defendió que gracias a la colaboración entre la comunidad y Valencia, a la que también se han sumado empresarios y organismos sociales, será posible lograr esa cofinanciación. «Nuestra posición logística en el sur de Europa es un argumento de una contundencia brutal», aseguró.

La reapertura de la línea internacional entre Huesca y Pau también recibió un espaldarazo a falta de ratificación oficial. La DGA señaló que la Comisión Europea está interesada en no perder la continuidad de los trabajos hechos en Francia y han propuesto presentar otro proyecto el próximo año de cara a finalizar estudios y estar en disposición de ejecutar obras.

Se trata de triplicar las oportunidades, porque hasta ahora se aportaba un 95% para los corredores grandes y 5% para el resto de proyectos. A partir de ahora, la proporción será 85%-15%, dentro de los presupuestos en las convocatorias en que los proyectos presentados compiten entre sí.

Además, también hay una decisión de la Comisión para modificar el porcentaje de financiación de estudios, que era de un 40% para obras y un 50% para estudios, y que ahora financiará al 50% ambos conceptos. Así, a partir de la ejecución de obras en el periodo 2021-2027, estas estarán financiadas al 50%.

Lambán anunció que para aprovechar este nuevo marco financiero mantendrá un encuentros con los dirigentes de la región francesa de Nueva Aquitania. «Vamos a jugar nuestras bazas, por parte de la Comisión no vamos a tener problemas, los podemos tener en otro lado, pero vamos a trabajar para tener aliados», indicó. Las negociaciones en los próximos meses se auguran intensas.