La industria y los salarios se perfilan como uno de los talones de Aquiles de la economía aragonesa en estos años de recuperación. Hay más, pero ayer la Cámara de Comercio de Zaragoza consideró prioritario poner en marcha en Aragón un plan industrial «potente» y dotado económicamente para los años 2018-2020. El director general de la institución, José Miguel Sánchez, subrayó que el espejo en el que debe mirarse Aragón es el País Vasco y concretó que los ejes vertebrales del plan deben pivotar en la mejora de la competititividad, el empleo de calidad, la industria 4.0 y el impulso de proyectos estratégicos para Aragón.
La petición de la Cámara de Zaragoza surge tras analizar la evolución de la economía aragonesa en el 2016, cuyo informe fue presentado ayer. En el estudio se detecta un «comportamiento deficiente» de la industria respecto al resto de sectores, así como un retroceso del consumo de los hogares, según explicó el catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza, Marcos Sanso. El informe advierte de un «menor dinamismo» del gasto de los hogares en los sectores que dependen de la renta disponible, es decir, comercio, vivienda y servicios. De ahí, que la Cámara de Comercio reclame también un «incremento salarial importante» en los próximos años. «Los sectores más productivos tienen que hacer un esfuerzo y servir de ejemplo al resto», dijo Sánchez.
PRODUCTIVIDAD
Sin embargo, el informe, que presta especial atención a la realidad del tejido empresarial de Aragón --se ha analizado una muestra de casi 45.000 empresas con sede en Aragón entre los años 2000 y 2015--, concluye que tan solo existen hoy tres sectores que muestran una productividad «sostenible» que permita crecimientos de la renta salarial. Se trata de la logística, la sanidad y los servicios sociales, y la agroalimentación. «Solo estos podrían subir los salarios y mantenerlos, porque el resto todavía presentan cicatrices de la crisis económica», remarcó Sanso.
El Informe Económico de Aragón 2016, editado por la Fundación Basilio Paraíso de la Cámara de Comercio e Ibercaja, analiza un total de 23 sectores y cinco de ellos (inmobiliario, construcción, hostelería, actividades artísticas y entretenimiento y el sector metalúrgico) tienen todavía valores negativos en productividad. Este último, entra en esa clasificación, lo que muestra un leve retroceso de la industria aragonesa.
«El sector industrial es el más abierto al comercio exterior, es muy competitivo y trabaja con márgenes muy escasos, por lo que una pérdida de beneficio se traduce en pérdida de valor añadido y, consecuentemente, de competitividad», apuntó Sanso. El resto de sectores, excepto los que tienen tasas negativas, siguen recuperando niveles de productividad, pero no llegan a los alcanzados antes de la crisis.
Pese a todo, la recuperación de la economía aragonesa tiene su reflejo en la mejora de la rentabilidad media de las empresas, que alcanzó en el 2016 el 2,27% frente al 0,85% del 2014, primer año en positivo tras cuatro años de pérdidas. Esto ha sido posible gracias a tres años consecutivos de crecimiento económico (del 2014 al 2016) con una evolución del PIB muy similar.
MENOS DINAMISMO
El informe revela que en 2016 el crecimiento de Aragón se mantuvo demasiado rezagado respecto al registrado a nivel nacional: un 2,7% frente al 3,2% en España. La tendencia es que se mantenga también este ritmo del PIB en el 2017. «Que ocurra un año aislado no es problema, pero que el resultado se repita por segundo año revela una falta de dinamismo que es deseable corregir», aseguró ayer Sanso. A pesar de este dato, Aragón sigue siendo la quinta comunidad en términos de renta por habitante (seguida de Madrid, País Vasco, Navarra y Cataluña).
Sin embargo, esta evolución del crecimiento no le permitirá a Aragón seguir reduciendo la tasa de paro como lo ha hecho en los dos últimos años, recalcó el catedrático de Análisis Económico.
El director general de la Cámara de Comercio, por su parte, incidió en la situación del mercado laboral y los salarios en Aragón y reclamó una mejor calidad del empleo. «No creemos que el tipo de contratación que se da en estos momentos sea muy positivo para la economía». Del lado positivo el informe destaca que la población activa creció en Aragón en el 2016. El informe se presentará a las empresas el próximo lunes en la Cámara de Zaragoza.
