La unión de Podemos e Izquierda Unida no ha sido demasiado fructífera en la provincia de Zaragoza. Mientras que hace seis meses, por separado, el partido de Pablo Iglesias obtenía en torno a 102.600 votos y el de Alberto Garzón casi 35.000, ayer en conjunto apenas lograron 103.300 sufragios. Cinco municipios zaragozanos otorgaron su respaldo mayoritario a Podemos. Se trata de Lobera de Onsella (donde 10 de sus 17 censados confiaron en la formación lila), Artieda, Murillo de Gállego, Cerveruela y Ruesca. La cara opuesta fue Purujosa, la última población de la provincia de Zaragoza antes de entrar en la de Soria, donde el partido liderado por Pablo Iglesias no recibió ningún voto.
Otras formaciones alternativas también se hicieron un pequeño hueco en las urnas aragonesas. Es el caso del Pacma, defensor de los derechos de los animales, que recibió 117 votos en Utebo (en las anteriores elecciones obtuvo 92), o de Escaños en Blanco, que en esta misma localidad recibió 60 sufragios y en Tarazona, por ejemplo, ascendió hasta los 132.
Asimismo, un buen puñado de municipios diversificaron su elección de voto, repartiendo su apoyo hasta en doce partidos distintos, entre ellos --además de los principales-- el Movimiento Aragonés Social (MAS), VOX o Recortes Cero-Grupo Verde. Incluso el casi invisible UPD fue votado en Mequinenza y Purujosa.
