El proceso de presupuestos participativos de Zaragoza vuelve a estar en el centro de todas las críticas y a ser cuestionados por los zaragozanos y grupos políticos que exigen que se revise su modelo. Esta vez el detonante ha sido la decisión (técnica) de descartar la propuesta de crear un museo de Semana Santa, donde exponer los pasos y las imágenes, pese a ser la que más apoyos recibió durante el proceso de participación (918). La decisión no ha gustado nada en la Junta Coordinadora de Cofradías de Semana Santa de Zaragoza, que se plantea recurrir los estudios realizados por los servicios de Cultura y Arquitectura que declaran como «no viable».

La responsable de Participación Ciudadana, Elena Giner, explicó que los proyectos se han descartado porque no son competencia del ayuntamiento, su obra excede el presupuesto, no son viables técnicamente o ya están planificados. De hecho, este último argumento se ha utilizado para descartar un gran número de obras que han comenzado a ejecutarse recientemente.

Explicó que la propuesta de la junta de cofradías «no es viable para este proceso y en las condiciones que se plantean porque hay que garantizar que se pueda ejecutar», algo que desde el consistorio no pueden hacer. «Si no hay garantías de desarrollarlo no puede pasar a la siguiente fase», explicó.

REQUISITOS / Los servicios de Cultura explican que no existe un edificio municipal que cumpla «con una serie de requisitos para la conservación de las piezas» necesarios como la temperatura, la iluminación, el espacio expositivo o las estructuras que soporten los distintos pasos. El Palacio de Fuenclara, propuesta por los cofrades, no reúne estas condiciones, según Cultura.

En este sentido, el presidente de la junta de cofradías, Mariano Julve, explicó que estos requisitos tampoco se cumplen, «ni de lejos», actualmente, ya que los pasos y las imágenes se guardan en almacenes y garajes envueltos en plásticos, mantas y cartones «para evitar que se estropeen». «En cualquier lugar estarían mejor que ahora», aseguró.

Desde la junta no escondieron su «sorpresa» y «decepción» ante la decisión del ayuntamiento y no descartan tomar medidas. Para empezar, solicitarán una reunión con el área de Participación Ciudadana para analizar los informes de los técnicos y «ver si hay posibilidades de revisarlos o recurrirlos».

Desde el área de Arquitectura apuntan a que solo el antiguo colegio Juan de Lanuza respondería a las necesidades de espacio para albergar los pasos, pero matiza que sería necesaria una inversión de alrededor de 2.000.000 euros y que, aunque el edificio es municipal, está cedido a la DGA.

Para Julve, la negociación con el Gobierno de Aragón no es un argumento válido, como tampoco lo es la excusa de que no hay tiempo para adecuar las instalaciones. Explicó que la propuesta no tiene por qué ejecutarse a corto plazo, sino que hay que comenzar a trabajar en el proyecto. El presidente del Ámbito Cofrade, Daniel Latorre, coincidió en que la posibilidad de crear un museo conlleva un gran trabajo de organización ya que hay 25 cofradías y algunas tienen más de un paso. La Hermandad de la Sangre de Cristo tiene más de una docena de pasos guardados en un garaje de la calle San Vicente de Paúl, donde se cuela el agua, hay humedad, y la temperatura es la misma que en la calle. «Es muy fácil mejorar las actuales condiciones», aseguró, porque «no pueden ser más precarias que las actuales».