El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, afirmó ayer que el consistorio va a negociar con los propietarios del Tiro de Pichón-Club para el pago de los 7,2 millones de más que fija la sentencia del Tribunal Supremo por la expropiación de sus terrenos. El regidor insistió en que "este tipo de desgracias financieras no van a ser un menoscabo para el esfuerzo de este Gobierno municipal en atender los servicios públicos y la emergencia social".

Con la difícil situación que atraviesan las arcas municipales, afrontar el pago de 7,2 millones de euros que no estaban previstos en el presupuesto complica aún más la gestión de Zaragoza en Común. "Es un golpe bajo más de los tribunales, que llega en un mal momento", reconoció Santisteve, que anticipó que "si el fondo de inversión al que acudimos el año pasado (el fondo Impulsa) no acoge el pago de la sentencia, va a haber un problema serio y habrá que negociar con la propiedad y ver de dónde se sacan los recursos".

Con la sentencia del Supremo la vía judicial está agotada. El regidor no ocultó su sorpresa porque "por lo general estos tipos de sentencias suelen ser confirmatorias para el interés público". Y aquí ha ocurrido lo contrario. "Mientras que el precio del metro cuadrado se valoró en 187 euros, ahora se dispara a 772", explicó el alcalde, igualando a la valoración que tendría si este terreno se destinara a usos residenciales, aunque se encuentra a pocos metros del río Ebro, algo que la nueva Ley del Suelo nunca admitiría, pero que fue aprobada con posterioridad a la expropiación.

Mientras, los responsables de Tiro de Pichón celebran la "satisfactoria" sentencia y afrontan el cobro "con la misma actitud que cuando decidieron expropiar el suelo, sin ánimo de confrontación". "Siempre pensamos que teníamos razón y que el método que se utilizó para calcular el precio era erróneo y el Supremo lo ha confirmado", explicó ayer el gerente de las instalaciones en La Almozara, Aurelio Colás.