El teniente de alcalde de Servicios Públicos y Personal del Ayuntamiento de Zaragoza, Alberto Cubero, amaneció ayer con ganas de mantener el pulso a la oposición y un poco más en vilo el futuro de las 14 trabajadoras del servicio telefónico 010 del consistorio. Tras el nuevo revés judicial del pasado viernes, que le negaba la posibilidad de levantar la suspensión que pesa sobre la decisión del Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) de rescatarlo y subrogar a toda la plantilla, él mismo había asegurado que licitaría el contrato y se externalizaría. Pero ayer sorprendió a todos anunciando que se va a anular tal decisión y se elevará la propuesta al pleno, el próximo ordinario o uno extraordinario, para que todos los partidos se posicionen y la mayoría decida qué hacer.

El enésimo órdago a la oposición fue recibido por esta con sorpresa y cierta incredulidad y malestar por el hecho de que el edil de ZeC quiera seguir manteniendo esta guerra en lo ideológico a costa de que las trabajadoras sigan un poco más tiempo sin cobrar. Llevan desde junio sin ingresar un euro por su trabajo y continúan dadas de alta por una empresa que ya ha renunciado al servicio y con la que, al menos en teoría, el ayuntamiento no tiene ya relación contractual. Pero como, según Cubero, la externalización «no garantiza que vayan a pagarles», el culebrón del 010 seguirá sumando capítulos.

VOLUNTAD

Con el añadido que ahora tiene el aparente enfado del edil de ZeC porque la «buena voluntad» de la oposición haya conseguido, con su compañero Fernando Rivarés, titular de Economía, abrir el expediente para subrogar a los seis empleados de la sociedad ZgZ@Desarrollo Expo. Así que Cubero ahora, según explicó, entiende que puede copiar el modelo y entrar a debatir la municipalización del 010, «porque el problema era que no lo había llevado al pleno», dijo.

Un acto de «chulería e inconsciencia». Así lo calificó la socialista Marta Aparicio en el debate de ayer en la comisión del área. A costa de hacer rehenes a las trabajadoras, remarcó, al igual que el concejal del PP, José Ignacio Senao, quien fue más duro con él: «Lo ideal sería que no cobre ni usted ni ZeC hasta que lo resuelva». Solo Leticia Crespo, de CHA, confió que el debate en el pleno dé al proceso «más garantías».